FAE PRO ADRA San Felipe hace un llamado para captar familias de acogida

Familias de Acogida Especializada con Programa de Protección (FAE PRO) está en la búsqueda de captar familias que estén interesadas en ser parte del programa, el cual está destinado a proteger a niños, niñas y adolescentes de cualquier forma de violencia, con el fin de interrumpir y reparar trayectorias de desarrollo de los menores, afectadas por distintas formas de victimización.

El programa FAE, el cual es ejecutado por la Agencia Adventista de Desarrollo y Recursos Asistenciales (ADRA), funciona a través del cuidado alternativo, con un modelo en el cual niños, niñas y adolescentes (NNA) que han sido privados temporalmente de su medio familiar por una orden judicial, sean acogidos por las familias capacitadas de este programa para su cuidado temporal y transitorio, que puede llegar a durar hasta dos años. En este sentido, la finalidad de FAE es interrumpir las experiencias de abandono, negligencia y violencia que han vivido los menores, y a través del cuidado de los adultos a cargo, recuperar la confianza y construir el vínculo de apego que han perdido. Luego del cuidado transitorio, el objetivo del programa es intentar que el menor vuelva con su familia de origen.

«Todas las familias de acogida saben que aquí no se puede trabajar la adopción. Se tiene que entender que esto es de carácter transitorio y nosotros como programa tenemos que dar respuesta a todo el proceso de intervención», indicó María José Campos, psicóloga de difusión y captación de FAE PRO San Felipe.

FAE, que también trabaja en conjunto con ‘Mejor Niñez’, lleva funcionando varios años y desde el 2019 bajo la ejecución de ADRA, pero recién este mes de septiembre se activó el área de difusión y captación del programa, que pueda ayudar a atraer familias interesadas. El programa cuenta con 90 niños, niñas y adolescentes inscritos, los cuales necesitan una familia de acogida externa para iniciar el proceso de intervención.

«Hoy día FAE PRO San Felipe está en una búsqueda activa de familias de acogida externa, que puedan colaborar y constituirse como una red de apoyo para los niños que están ingresados en nuestro programa, con la finalidad de otorgar durante el tiempo de intervención, el cuidado y protección que los niños necesitan».

– ¿En qué se diferencia FAE de otros programas?

– Hoy las residencias no dan abasto y no están dando respuesta a lo que sí necesita un niño, que es contención emocional específica y acompañamiento específico, ya que tenemos grupos de niños con características distintas, edades distintas, con vulneraciones distintas, que necesitan un cuidado especializado y a eso apuesta FAE, que la familia de acogida pueda dar respuesta a esas necesidades durante el proceso de acogimiento.

– ¿Qué requisitos debe cumplir una familia de acogida externa?

– Primero la motivación de ser parte del programa, por otra parte, la aptitud en cuanto al acogimiento, comprender que es transitorio y que no tiene relación con la adopción. Por otro lado, que cuenten con los ingresos suficientes para incorporar a una persona más al contexto familiar. Otra cosa es que cuando ellos ingresan acá al programa, se les hace una evaluación psicosocial para evaluar las condiciones psíquicas y sociales de ese grupo familiar. Hay que tener disposición de que acá es importante tener un vínculo de afecto con los niños, que es lo que va a propiciar parte de la resignificación de la historia de ese niño, que ha sido vulnerado en distintas áreas.

– Además del acogimiento del niño, ¿qué más debe realizar esa familia?

– Colaborar con el proceso de intervención del niño, como acompañarlo a sus intervenciones psicológicas, tener la disposición de recibir al equipo FAE para visualizar las necesidades y los requerimientos. Al ingresar a FAE se les dan las herramientas para enfrentar el acogimiento, no es que ellos ingresen acá, sean evaluados y ya tenemos listo al acogimiento, si no que es todo un proceso, desde que son declarados idóneos como familia de acogida, hay dos meses en los que se prepara a la familia para el acogimiento, luego ya están aptos para recibir al niño y yo hago esa función de acompañar por medio de psicoeducación y luego están listos para el enlace, que puede llegar a durar dos años.

– ¿Cómo afrontan las familias la separación del niño luego del proceso de intervención?

– Durante esos dos años, aparte de trabajar con el equipo que está interviniendo con ese niño y esa familia, hay un acompañamiento tanto desde el área de captación como desde la unidad de valoración que está en Santiago, en donde se hacen talleres de autocuidado con las familias de acogida, aparte del acompañamiento que yo realizo durante los dos años y luego que ya transcurre ese proceso de intervención del niño y eventualmente ese niño está listo para volver con su familia de origen, se hace un proceso de acompañamiento post acogimiento, que es acompañar a la familia luego de ese quiebre que se genera, que se puede comprender también como un duelo y luego de los tres meses que dura el proceso, se evalúa si ellos quieren continuar siendo familia de acogida.

– ¿Qué tan importante llega a ser la intervención de las familias de acogida?

– Todos los niños que están acá, la gran mayoría ya han pasado por otros sistemas, Programas de Protección Especializada en Maltratos y Abuso Sexual Infantil (PRM), Programa de Intervención Escolar (PIE), consumo, violencia intrafamiliar, maltrato grave, entonces los niños acá sí requieren de un apoyo especializado y es por eso que es importante que esta familia de acogida, sea competente respecto de las necesidades de ese niño o niña.

– ¿Por qué es tan importante la difusión del programa FAE?

– FAE busca una red de protección que garantice que el niño tenga otra manera de vivir, otra manera de relacionarse con otros, porque si nos mantenemos dentro de las mismas familias (familias de origen y sin que haya un proceso de intervención) por el tiempo que sea, no vamos a generar ese cambio.  Tenemos 90 niños para los cuales no hay familias de acogida externa. Hoy en día tenemos una lista de 11 familias externas que están en un proceso para ser evaluadas, las cuales todavía no sabemos si es que son idóneas, y estas personas han llegado por la poca difusión que ha habido, por eso lo que necesitamos es difusión para tener familias, porque si no, vamos a seguir en la misma rueda.

PARA SABER MÁS ACERCA DE FAE PRO

Dirección: Salinas #68, San Felipe

A través de su página web: https://adra.cl/sefae/

Escaneando el código QR:

María José Campos, psicóloga de difusión y captación de FAE PRO San Felipe.