Carabineros, vecinos, lectores y donadores anónimos:
Luego que ayer jueves en Diario El Trabajo publicáramos la dramática historia que viven tres familias bolivianas con niños chicos en nuestra comuna, la reacción positiva de nuestros lectores se hicieron manifiestas a través del amor y solidaridad representados en las donaciones que empezaron a llegar a estos pequeñitos y sus padres.
El génesis de esta campaña humanitaria lo generó la vecina de estas familias, Viviana Ramírez Astudillo, quien ha coordinado casi todas las acciones sin buscar protagonismo. Dicho esto y después que publicamos la noticia, el primero en reaccionar fue el propio coordinador de la Oficina Municipal de Migración, Jorge Rubio, quien la misma noche del miércoles llegó con mercadería y levantó un informe sobre cada uno de los integrantes de estas familias para iniciar con el proceso de regulación migratoria y confección de su Registro Social de Hogares.
Ya en horas de la mañana las llamadas telefónicas a Diario El Trabajo y también a doña Viviana fueron bastantes y poco a poco los recursos están llegando a las manos que necesitan la ayuda. Entre las instituciones que se han hecho presente con mercadería, está la Oficina de Integración Comunitaria de la Segunda Comisaría de Carabineros San Felipe, en este caso representada por el cabo 1º Alexi Araneda y el sargento 1º Alejandro Martínez, ellos también activaron otras redes de voluntariados locales y la ayuda empezó a llegar.
Quien también donó una cama de dos plazas es el vecino Danilo Godoy, quien entregó a estas familias el mueble con todos sus implementos, colchón y ropa de cama, pues estas familias dormían en el suelo algunos de sus integrantes.
ABUELA AGRADECE
Diario El Trabajo supo también que varios profesionales de la Dideco, quienes no quisieron aparecer en fotos, a título personal también se involucraron y llevaron recursos en mercadería, ropa y otros artículos.
«Muchísimas gracias, estamos muy agradecidos por todo el cariño que los chilenos nos están brindando. Gracias por la mercadería, a nombre de mis hijos y mis nietos yo les doy las gracias, veremos cómo conseguir un microondas para calentar las comidas preparadas enlatadas que nos han donado, Dios les bendiga a todos, estamos muy impresionados con estas muestras de cariño, nunca nos esperamos tanto», comentó emocionada la abuelita de los niños, Ángela Cartagena Grande, quien cuida de ellos mientras sus hijos salen a trabajar en la fruta.
PODEMOS AYUDAR
Según una lista hecha para ser publicada en esta crónica, lo que más urge en estos momentos para estas familias es: Leche en polvo o líquida; mercadería en general para el hogar; pañales XL, papel higiénico, una lavadora pues no tienen; cobijas, ropa para niños entre 1 año a los 11 años de edad, zapatos para el mismo rango etario, una estufa o cocina, sólo tienen una cocinilla; utensilios de cocina, vajillas; harina, levadura, tarros de jurel y alguna refrigeradora usada. Los interesados en cambiarles la vida a estas tres familias pueden llamar al +56 9 5762 9806.
Roberto González Short