Entrenador de fútbol amateur:
- Se necesita mayor coordinación entre clubes y mayor preocupación con las jugadoras que deben equiparse en camarines sucios, malolientes y en medio de pozas de agua.
Cada día el fútbol femenino adquiere mayor preponderancia en nuestro país. Eso se ve reflejado en la participación en un mundial, ahora una histórica clasificación a los Juegos Olímpicos de Tokio, e incluso tenemos una árbitra oriunda de San Felipe como es Belén Carvajal.
¿Qué pasará en San Felipe con el fútbol femenino? ¿Cuál será la realidad? Para ello conversamos con Víctor Estay, de profesión Trabajador Social y Técnico en rehabilitación, aparte de eso es futbolista amateur, del año ´95, tiene tarjera en su Club Sargento Aldea. Lo encontramos en el Estadio Fiscal practicando fútbol con algunas mujeres que se juntan en el lugar, son 11 a 12 más o menos. Solicitamos conversar con él para conocer la realidad en cuanto a infraestructura y como se vive el fútbol femenino.
– Cuéntanos como está el fútbol femenino en San Felipe.
– La realidad que este deporte está bastante abandonado, faltan condiciones, infraestructura, espacios, seguridad para que las niñas puedan practicar y desarrollarse en este deporte, como ellas se lo merecen.
– ¿Cuál es la realidad en el fondo?, si vamos a infraestructura, camarines, por ejemplo, baños para ellas. Sabemos que estamos en pandemia, pero si estamos en un año normal, ¿cuál es la situación que enfrentan?
– Le cuento, en un año normal se juega todos los domingos, donde las niñas participan; primero juega la tercera y segunda de los hombres, luego viejos Crack y recién vienen las niñas después de haber utilizado un solo camarín los hombres. Ustedes se pueden imaginar las condiciones en que queda ese camarín… equipos en el suelo, pozas de agua, porque hay camarines que tienen sus goteras, el agua chorrea, baños orinados donde las niñas se deben sentar, no creo que sea muy digno porque el hombre no deja en condiciones muy limpio el camarín después de utilizarlo, no está esa preocupación, y yo creo que no están dadas las condiciones para que las niñas se puedan cambiar ropa cómodamente.
Más adelante agrega que esto se podría solucionar si algún encargado o delegado de club se preocupa del tema.
– O sea, ¿podría pasar alguien a limpiar antes de que ingresen las niñas?
– Fácilmente, si uno no tiene por qué tener un lujo de camarín para las mujeres si el camarín está aseado y lo tienen con agüita.
– ¿Esa es la realidad que se vive en la parte higiénica e infraestructura?
– Sí, siempre las quejas constantes de las niñas es la suciedad que ellas se encuentran cuando van a ocupar las instalaciones de los camarines en cualquier recinto, ya sea cuando juegan de local o de visita.
Nos comenta que siempre se le han dado posibilidades de dirigir equipos, ha dirigido series infantiles, todas las series adultas; «he conseguido mis logros dirigiéndolos porque lo hago con amor, pero mi gran objetivo es tomar una serie femenina; en este momento no estoy tomando una serie femenina, pero me junto con mujeres de distintos clubes y hacemos esto, nos juntamos el día tanto llegan 11, 12 niñas y nos ponemos a chutear para mejorar, vienen a entrenar con un profesor y después de eso nos dedicamos a hacer puro fútbol», dice Estay.
– Pasando a otro tema, ¿cómo está el nivel del fútbol femenino?, nos decías que hay buen ambiente, compañerismo. Te ha tocado dirigir equipos de hombres y mujeres, ¿es mucha la diferencia que hay?
– Es muy diferente, el compañerismo, el sentimiento que provocan entre ellas es muy bonito ver el fútbol femenino, se rescatan valores, esos que se habían perdido, uno ahora ve que va llegando gente, más familias a ver el fútbol femenino porque es llamativo. Antiguamente la gente se iba a reír de cómo las mujeres corrían mal, que no le pegaban a la pelota, pero ahora usted se da cuenta, si va a ver un partido de fútbol femenino, los hombres le ponen más atención al partido de las mujeres que a la primera serie de honor que tiene su club.
– Noto una sonrisa de agrado al hablar del fútbol femenino, ¿es mucha la diferencia comparado con el de los hombres?
– Sí en cuanto al trato, ellas entre mujeres siempre se están ayudando constantemente.
– Igual se pegan ‘patás’ dentro de la cancha.
– Sí, existe su ‘chuletita’, entremedio ellas se golpean, pero no con el afán de lesionar, sino que con el afán que llegan a destiempo a la pelota y se golpean, pero es un tema de descoordinación porque hay muchas que recién están aprendiendo a marcar, o muchas aprendiendo recién a hacer un enganche, y por eso se traban, chocan, pero nunca con la maldad de lesionar a la otra, siempre chocan y se dan la mano, se levantan, se dan un abrazo y la mayoría se conocen, todas las niñas que juegan acá se conocen en este medio porque hace 2, 3 años que se ve esto, pero hay niñas que han jugado toda la vida, yo conozco niñas que son de Mario Inostroza, que han jugado de toda la vida las niñas, la señora impulsora de ese club ha jugado toda la vida y me da alegría que ya sean reconocidas, que tengan su espacio para poder jugar.
Al finalizar nos comenta que el fútbol femenino retomó esa noble tradición de ver a las familias en las canchas, algo que se había perdido por problemas de seguridad: «Los papás van a proteger a sus hijas en vez de ir a consumir alcohol, ahora se preocupan que su niña juega a la pelota y él orgulloso de verla», dice Víctor.
– ¿Alguna reflexión final sobre el fútbol femenino?
– Hay mucho por hacer, mucho por mejorar, falta coordinación entre los clubes y asociación se fomente de una manera como corresponde el fútbol femenino y se dé la valoración y connotación que esto provoca en el medio.
Importante señalar que el fútbol amateur se encuentra suspendido por la pandemia.