- Jefe de la unidad anunció que ya comenzaron trabajos para transformar antigua cocina en un taller laboral.
Miguel Ángel Gutiérrez habita el pabellón cinco del Centro de Cumplimiento Penitenciario (CCP) de San Felipe, es allí donde pasa horas creando cada uno de los diseños que luego convierte en mosaico y plasma en las mesas que transforma en verdaderas obras de arte.
Con 39 años, Miguel Ángel trabaja junto a un compañero que cumple su condena en el mismo pabellón. Los dos se encargan de todo el proceso de creación, y si bien generalmente llevan a la madera sus propias ideas, también han materializado las de los clientes, quienes llegan a la unidad a solicitar un diseño particular.
El recluso reconoce que pese al poco tiempo que llevan con esta iniciativa, han obtenido muy buenos resultados.
«Llevamos dos meses y hemos hecho aproximadamente diez mesas con mosaicos. Hemos donado algunas a la municipalidad de San Felipe y otras las hemos vendido al público».
Esta iniciativa ha sido respaldada por el jefe del establecimiento penitenciario, mayor Brallan Silva, quien, además, impulsó la conversión de la antigua central de alimentación en un nuevo taller de mosaicos.
«Hace poco se realizó la inauguración de la nueva central de alimentación y nos quedó el espacio donde estaba la antigua. Eso ahora va a ser destinado a un taller de mosaico, donde le vamos a dar la posibilidad a alrededor de seis internos para trabajar en esta técnica. Como administración debemos aprovechar todos los espacios para aplicar talleres y la reinserción social de los privados de libertad».
Por su parte la jefa técnica (s) del CCP de San Felipe, Alejandra Herrera, destacó que esta iniciativa «implica contar con un espacio más dentro de la unidad donde podemos ubicar a internos que puedan aprender una labor. Esto significa que podemos ubicar a personas que estén cumpliendo con su plan de intervención individual e ir avanzando en su proceso de reinserción».
En la actualidad se está habilitando el espacio y se espera que el taller comience a funcionar a fines del mes de octubre. Los reclusos que podrán instruirse en esta temática serán quienes, además de contar con un plan de intervención individual, sean propuestos por el área laboral.
