Andrea Navarrete, vecina del afectado por esta explosión, muestra a Diario El Trabajo la cocina destrozada luego del estallido.
Andrea Navarrete, vecina del afectado por esta explosión, muestra a Diario El Trabajo la cocina destrozada luego del estallido.

Cuando José Bastián, de 85 años y vecino de Villa La Escuadra, calle Circunvalación, se disponía a encender su cocina la tarde de este miércoles en la casa que renta desde hace tiempo, nunca imaginó que él y toda la casa serían sacudidos por una potente explosión que por poco le costó la vida.

Fue debido a que durante varias horas antes de ese momento, una fuga de gas se decretó al interior de la vivienda de José, ignorándolo el inquilino, situación que quedó estruendosamente al descubierto cuando el anciano disparó la chispa del fósforo que casi lo manda al otro mundo.

‘ZONA DE GUERRA’

Los vecinos también fueron sacudidos por la explosión, misma que desarmó la vivienda a nivel general, la puerta salió volando contra el portó del frente; las ventanas se reventaron; las vigas se quebraron y se desplomaron las paredes de la sala; la cocina quedó destruida y el abuelo tirado sobre los escombros, también las cobijas prendieron fuego, convirtiéndose la escena en pocos segundos en una situación verdaderamente peligrosa.

«La explosión fue muy fuerte, fue tan potente que hizo derribar las paredes, puertas y ventanas, televisores y enseres del hogar, la víctima se disponía a encender la cocina y explotó el cilindro de 15 kilos, el mismo estaba adentro de la casa, Bomberos llegamos ya cuando el Samu lo estaba atendiendo, el paciente fue trasladado con quemaduras complicadas al Hospital San Camilo», informó a Diario El Trabajo Juan Carlos Herrera, Comandante de Bomberos de San Felipe.

Nuestro medio tuvo acceso al interior de la vivienda minutos después del estallido, confirmando el porqué de la alarma de los vecinos, quienes aseguraron que ‘el señor vive solo, pero es una persona decente y no le causa problemas a nadie’. José Bastián fue hospitalizado con heridas en su cabeza y el cabello quemado, sin que se nos reportara su egreso hasta el cierre de nuestra edición.

Roberto González Short

rgonzalez@eltrabajo.cl

 

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