- Hecho ocurrido en la comuna de Llay Llay: Sentencia fue dictada la tarde de ayer martes en el Tribunal Oral tras un juicio después de 5 años de ocurridos los hechos. La justicia determinó que el sentenciado deba cumplir una pena privativa de libertad.
En la sala del Tribunal Oral en Lo Penal de San Felipe, los jueces resolvieron condenar a Cristian Hugo Bocaz Pizarro a la pena de ocho años de cárcel por el delito de violación en contra de un adolescente de 14 años de edad ocurrido en la comuna de Llay Llay.
La Fiscalía reveló que el acusado habría cometido el delito mediante el uso de la fuerza, hecho ocurrido en el mes de febrero del año 2013, exponiendo el relato de la víctima que en aquel entonces tenía 14 años de edad, detallando ante el estrado el ultraje sufrido.
El Fiscal Alejandro Bustos entregó al tribunal dos informes periciales psicológicos que analizaron el relato del afectado, acompañado de un peritaje del Servicio Médico Legal sin encontrarse evidencias, sin embargo no descartarían la ocurrencia del delito, explicando las razones detalladas en el informe.
Aunque el imputado, al prestar su testimonio negó los hechos acusados, el Tribunal acogió la tesis del Ministerio Público y pruebas de la parte querellante suficientes para declarar culpable al imputado Bocaz Pizarro, condenando a la pena de ocho años de presidio mayor en su grado mínimo, pese a los 10 años de cárcel que perseguía el Ministerio Público.
El Fiscal Alejandro Bustos informó a Diario El Trabajo que el actual sentenciado mantiene intachable conducta anterior, no obstante la justicia aplicó una pena privativa de libertad, manteniéndose a la espera que la sentencia quede firme y ejecutoriada.
“Es un evento único de violación, hubo otras insinuaciones, pero no tenían entidad para configurarse como delito. Los antecedentes que la Fiscalía mantenía, suficientes para ir a juicio, son por los cuales el imputado fue acusado”.
En tanto la Defensa del sentenciado mantiene un plazo de 10 días para elevar eventualmente un recurso de nulidad sobre este juicio ante la Corte de Apelaciones de Valparaíso.
Pablo Salinas Saldías