Varios comerciantes de la Feria Persa se mostraron ya indignados, pues aseguran que Esval no cumple con sus responsabilidades.

Sylvia Vergara – svergara@eltrabajo.cl

Desde hace más de un año, que los locatarios de la Feria Persa que se ubica en la Calle Merced, a sólo pasos de la Plaza de Armas, deben soportar desagradables olores del alcantarillado. La situación se hizo insoportable en los últimos días, lo que ha significado molestias físicas en los locatarios, quienes se ven obligados a cerrar los puestos y volver a sus casas.

MALOS OLORES

Los malos olores son percibidos por los visitantes a la feria, quienes muchas veces se devuelven y no entran, ya que muchos piensan que es responsabilidad de los locales y especialmente los baños que se ubican en el lugar, situación que los locatarios rechazan.

Vacío luce el pasillo principal de la Feria Persa, los malos olores son insoportables.

«Acá a nosotros nos da vergüenza que la gente crea que somos nosotros y que la mantención del baño está sucia, esto es de Esval. La gente entra al Persa y se tapa la nariz, se da la media vuelta y se va», señaló Verónica González, una de las locatarias más afectadas.

Este último hecho ha producido que las ventas hayan bajado considerablemente, ya que la gente no está entrando a la feria, molestos por los malos olores. La situación afectaría a varios locales comerciales que se ubican en la cuadra, por ello varios locatarios del Persa se han trasladado hasta la empresa Esval para exponer la situación.

LIMPIEZA

Y es así que luego de alrededor de un año, según explican los dueños de los locales, esta semana se limpiaron los desagües, sin embargo el olor todavía era posible ser percibido, justo en la entrada de la feria, donde se ubica una de las cámaras, por donde incluso saldrían gases.

«Acá como nosotros tememos las cámaras que están adentro y como es el único lugar que respiran, entonces lo primero que encuentran, salen y cuando abrieron, salen gases, en cualquier momento va a explotar», dijo Verónica.

Situación que se ve acrecentada por el calor en la temporada de verano, aunque en esta fecha la situación ya se hizo insoportable para los locatarios.

Por ahora la situación está más tranquila, sin embargo los locatarios piensan que los olores volverán a aparecer, por lo que anunciaron que si no existe preocupación de Esval ante esta situación, saldrán a la calle a protestar.

«Que se haga una mantención una vez al mes que se preocupen, que hagan valer el sueldo, que se ganen las ‘lucas’, si yo pago es porque tengo que cobrar el servicio», dijo la más afectada.

 

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