Los Miembros Honorarios del Club Adulto Mayor ‘Moisés del Fierro’, de la Cuarta Compañía de Bomberos de San Felipe, realizan una gran labor y ayuda social a los miembros de su institución, entregando ayuda monetaria, cajas de mercadería y elementos clínicos para los voluntarios que estén pasando por una difícil situación.
El club de tercera edad, que se formó en el año 2000, ha estado trabajando silenciosamente en pos de sus funcionarios. La idea comenzó cuando los ya retirados Bomberos necesitaban un espacio donde reunirse y poder planificar cómo seguir aportando a la institución por la que prácticamente han entregado su vida.
Actualmente son 20 los socios, los cuales están constantemente postulando a proyectos y así poder conseguir elementos que luego serán facilitados a los funcionarios que estén en una situación de salud complicada, tengan problemas económicos, tengan un accidente, o incluso debido a la muerte de algún familiar directo.
Gracias a los proyectos que se han adjudicado, los socios ya cuentan con sillas de rueda, bastones, ‘burritos’, catres clínicos, colchones anti escaras, tomadores de presión y distintos botiquines de emergencia. La directiva sigue pensando cómo conseguir más fondos y poder crecer más como Club del Adulto Mayor.
Con respecto a esta iniciativa, el presidente del club, Silvio Escudero, explicó que «el origen de esto parte del momento en que la gente se comienza a dar cuenta que llegamos a una edad. De repente en las compañías no nos toman mucho (en consideración), dicen ‘qué sabe este viejo’ o qué sé yo, pero hay experiencia, entonces todavía nos sentimos con ganas de aportar. Se formó también con la idea de tener un lugar donde sentarnos a conversar, gente más o menos de la misma edad, porque hay veces que sucede que las personas quedan solas, no tienen con quien conversar y es bonito porque nosotros nos juntamos, recordamos lo que ha pasado y así hemos ido haciendo cosas, hasta llegar a formar el club de tercera edad».
Además, el presidente agregó que «nosotros hemos visto que en el último tiempo la situación está bastante complicada, en los servicios públicos de repente cuesta conseguir este tipo de elementos y de la gente nuestra, tenemos cuatro o cinco voluntarios que están sobrepasando los 90 años, otros que estamos en la escala de los 80, y todos vemos la necesidad que esto conlleva; que las cosas son caras, que cuesta juntarlas. Nosotros desde que estamos en el club, hemos sido un soporte para la institución misma, para los voluntarios de acá».
En este sentido, el secretario del Club Adulto Mayor ‘Moisés del Fierro’, Guillermo García, sostuvo que «esto es para todo el cuerpo, porque aquí es muy fácil que uno se accidente con los incendios, ya sean jóvenes o adultos. Entonces eso está a disposición de toda la gente del Cuerpo que lo necesite (…) Nosotros, con lo poco que se cobra, ayudamos a los que están más o menos enfermitos, y no es un gran aporte, pero de algo les sirve, ya sea para un remedio. Hacemos la labor de velar por nosotros mismos», explicó.
Finalmente, Silvio Escudero aprovechó la instancia para realizar una crítica a la legislación actual, en donde expresó que «el Estado ha tenido poco reconocimiento para Bomberos, se han olvidado de que nosotros como Bomberos, quienes estamos en esta situación hoy día hemos entregado parte de nuestra vida a la institución, y hay un proyecto que duerme en el congreso del año 2014, donde se hizo una petición de que a todos los voluntarios de todos los Bomberos de Chile, que cumplieran más de 35 años de servicio, se les hiciera una pensión vitalicia en vista de lo que han entregado. Las personas que le he comentado, que están enfermos, nos tocó vivir el tiempo duro de Bomberos, cuando no había equipos de protección, cuando no había botas, no había nada, íbamos con nuestra ropa de calle a los incendios (…) No existe una ley que hable de las enfermedades profesionales que adquirieron los Bomberos», concluyó.