PUTAENDO.- Superando todas las expectativas, cerca de 2.000 jóvenes provenientes de todos los rincones de la Diócesis de Aconcagua, se dieron cita para participar en la Segunda Peregrinación Juvenil Diocesana de la Pastoral Juvenil. A eso de las 8:00 horas comenzaron llegar las distintas delegaciones que conforman la Comunidad Católica Diocesana. Capillas, colegios, comunidades, centros juveniles provenientes de Cabildo, Petorca, Los Andes, San Felipe, Panquehue, Santa María, San Esteban, Catemu, Llay-Llay, Rinconada de Los Andes, Calle Larga y Putaendo, se congregaron en el frontis del templo parroquial donde eran esperado por la Pastoral Juvenil de la parroquia San Antonio de Putaendo con el cura Pedro Salinas a la cabeza quien junto a los jóvenes, era el encargado de recibir, motivar y hacer sentir como en su casa a las ilustres visitas.
En poco más de dos horas, la plaza de la comuna se repletó de buses, micros y vehículos que trasportaban a los jóvenes que superaron con creses los 1.500 asistentes esperados por los organizadores, ya que la actividad congregó tanto en la plaza, trayecto y en el acto principal, a cerca de 2.000 jóvenes. Luego de un emotivo momento de oración en la plaza de la comuna, donde el Padre Pedro recibió la visita del mismo Obispo Cristian Contreras, los jóvenes comenzaron su recorrido bajando por la céntrica Calle Comercio y Calle Brasil, para llegar pasado el medio día a la explanada del Santo Cristo de Rinconada, donde la Eucaristía fue presidida por el obispo Contreras.
La actividad estuvo enmarcada en el año en que la Iglesia Católica tiene como protagonistas a los jóvenes, donde los signos son la Bandera chilena, La Biblia y la Cruz, lo que dio un realce especial a esta actividad que por segundo año consecutivo se realiza en la comuna de Putaendo
El Padre Pedro Salinas se mostró emocionado y muy contento con la respuesta de los jóvenes, agregando que para la comunidad católica putaendina, era todo un orgullo ser los anfitriones de esta maravillosa peregrinación que mostraba todo el amor de Cristo hacia los jóvenes y como también los jóvenes vibran con el amor de Cristo en esta maravillosa actividad que esperan, se siga realizando en Putaendo.
Patricio Gallardo.