Humberto González advierte que en 4 años podría secarse:
Muchos de nuestros lectores supondrían que con los 66.3 mm. de aguas lluvias caídas a la fecha, de seguro las napas subterráneas de la olla hidrográfica 307 del Valle de Aconcagua que contempla los APR de El Asiento, La Troya, Las Cabras de Santa María, San Roque de Panquehue, Algarrobal, Barrancas y El Asiento, estas ya estuvieran subiendo de nivel por las filtraciones subterráneas, sin embargo esta información es incorrecta. Lo anterior se desprende de la información suministrada a Diario El Trabajo por el presidente de la Cooperativa de Agua Potable La Troya, Humberto González Mondaca.
Nuestro medio solicitó a dicho funcionario una entrevista para poder conocer el nivel de agua en el pozo principal de este APR, lo que nos permitió confirmar en terreno que este pozo en lugar de llenarse, más bien se seca 50 cm. cada mes, una tendencia que se viene dando desde hace casi ocho años.
«Este jueves hicimos una medición del nivel del agua acá en el pozo principal de nuestro APR, la medición nos reportó 49.80 metros; la medición anterior hecha en febrero nos dio 47.90 metros, o sea, en menos de cuatro meses ha bajado el nivel unos 2 metros, lo que nos da 50 cm. al mes menos de agua lo que tenemos, un panorama poco alentador», comentó González a nuestro medio.
– ¿Pero con estas lluvias no se presume que el nivel debe subir?
– No es así. Si hacemos un hoyo en la tierra, yo le aseguro que al metro de profundidad ya la tierra está seca. No es tan fácil que se llenen las napas, se llenan por los canales internos en las profundidades y la cordillera, es la nieve derretida la que llena estos acuíferos subterráneos, o sea, que hasta los meses calientes, septiembre, octubre, será cuando podremos ver que suba el nivel del agua, si continúan las lluvias.
– ¿Cómo nos beneficiarán entonces estas lluvias?
– Estas lluvias son muy importantes, ahora con estas aguas caídas los agricultores podrán empezar sus periodos de riego hasta un mes después, lo que hará que no echen a andar las baterías de pozos del valle, esa agua no se gastará en riego y ahí se verá entonces las ganancias en cuanto al recurso hídrico.
– ¿Qué pasa si estos pozos siguen bajando de nivel del agua?
– Si el comportamiento sigue siendo el mismo, este pozo estaría sentenciado a quedar seco en tan sólo cuatro años, o sea, en cuatro años ya no habría agua de este pozo. Sin embargo, con estas lluvias y las que ya están siendo anunciadas, el panorama cambiará para bien este mismo año, apenas entremos a la primavera.
Roberto González Short
