Cuando a los activistas comunales se les nombra con el cargo de ‘Presidentes’ de juntas vecinales y agrupaciones populares, siempre se espera que el primer día en funciones de dichos líderes, sean aplaudidas, admirados en sus poblaciones por ostentar un cargo de liderazgo.
RATONES LA RECIBIERON
Sin embargo, quienes recibieron este martes a la nueva Presidente de la Junta Vecinal Nº 8 de Villa El Esfuerzo en su primer día de funciones, fueron algunos ratones y cucarachas que corrieron a esconderse en las rendijas de la tétrica sede vecinal, misma que está en ruinas luego de que delincuentes la han visitado varias veces para robar y hacer daños al inmueble.
Se trata de Sandra Díaz, nueva presidente de dicha junta vecinal, que recibió con las manos vacías y puertas destruidas su sede vecinal.
«Estoy recibiendo esta sede en muy malas condiciones, lo peor es que nos han robado todo, las sillas, mesas; equipo de uso comunal; han quebrado los vidrios, hicieron tira las cortinas, el medidor lo hicieron tira así como los portones y la pandereta, tenemos que empezar de cero», explicó la mujer que intenta luchar porque su sede vuelva a ser utilizable para un adecuado uso.
Según informó Díaz a Diario El Trabajo, los amigos de lo ajeno se han llevado prácticamente todo, pues reclaman poco interés de las autoridades en facilitar algún tipo de vigilancia.
«En diciembre nos robaron como cuatro veces, hasta hoy es que entro a mis funciones como Presidente, no he hablado con los concejales ni he recibido un informe del presidente anterior, lo que sé, es que aquí a la sede vienen a fumar droga y a tomar licor», agregó la líder vecinal.
«Yo lo que pido al municipio, que por favor nos ayuden con un proyecto que esta directiva pasada metió hace algunas semanas, para que podamos reparar la sede, las plazoletas y la iluminación en nuestra población», puntualizó Díaz.
Entre las actividades que Díaz anunció que realizarían, están el hacer Bingos, ventas para generar recursos y así poder pagar los recibos de agua y luz, que ya están atrasados.
«ME DA LÁSTIMA»
Consultada una vecina del sector y quien también pertenece a la nueva directiva, la situación de esta sede ‘lo que da es lástima’.
«A mí me da lástima lo que está pasando en nuestra sede, pues se trata de unas instalaciones que nos dejaron otras familias, pues nuestra población tiene casi los 50 años de existir, se ha luchado harto por esta sede, estoy segura de que este local y los demás sectores afectados, son recuperables, esto sólo si a nuestra presidente la apoyamos», comentó Sandra Baras, de la directiva vecinal a Diario El Trabajo.
Bien sea por sus ganas de trabajar en beneficio de sus vecinos en un proyecto en donde sólo quedan ruinas, o porque es un deber moral el buscar la superación personal y colectiva, las razones que mueven a estas mujeres a enfrentar sin nada la adversidad de toda una población, es merecedor de nuestro reconocimiento sincero, ahora el municipio tiene la palabra. ¡Adelante campeonas!
Roberto González Short
rgonzalez@eltrabajo.cl