Carabineros tuvo que intervenir nuevamente para apaciguar los ánimos, pues las partes involucradas siguen defendiendo cada una por sus intereses.
Carabineros tuvo que intervenir nuevamente para apaciguar los ánimos, pues las partes involucradas siguen defendiendo cada una por sus intereses.

SANTA MARÍA.– El día sábado 26 en la mañana, la Comunidad de Campo Jahuel vivió otro momento de tensión cuando mineros a cargo de José Ortega Vera, habrían entrado al predio cortando cadenas y candados, según relatan miembros de la directiva de dicha comunidad, situación que se ha repetido durante la semana pasada y que fue denunciada en el programa radial Polémica al Rojo de Radio 10. La situación fue bastante tensa a ratos, debido a la verdadera rabia que existe entre los pobladores contra las empresas mineras que pretenden explotar en la zona de acopio de agua de los pobladores, recordando que Jahuel fue declarada una de las zonas de mayor sequía y su afectación en la Región de Valparaíso.

Como ejemplo de esto, sus moradores viven hace meses un razonamiento que les impide acceder al líquido en horas de la noche. Samuel Herrera, Director de la Comunidad de Campo, declaró que los hechos comenzaron a sucintarse desde el día jueves.

«El jueves tuvimos el mismo caso. Llegó éste caballero cortó candado y la cadena, yo le dije que eso no se hacía y todo y dijo que la próxima vez ubicaría a nuestro presidente de la comunidad para abrir nuestro candado y poner el de ellos, pero resulta que hoy día nos encontramos con el mismo problema y yo lo vi cuando lo cortó», informó Herrera a Diario El Trabajo.

Cabe destacar, que se requirió la presencia de Carabineros de Santa María debido a la violencia entre los habitantes, pues este caso ya acompaña por varios años el diario vivir de lo jahuelinos. Rubén Muñoz, Presidente de la Comunidad de Campo, dijo que esta vez se llevarán a cabo acciones legales debido a que puede llegar a una veintena de cadenas cortadas durante el conflicto, «de hecho, la cadena original daba más de diez vueltas a las vigas del portón y ahora se aprecia un pedazo de no más de 40 centímetros de eslabones que apenas dan una vuelta para encadenarse», dijo Muñoz.

Según José Ortega, quien también quiso ser entrevistado, dijo que la idea es trabajar como corresponde, «como dijo la Seremi, si sacábamos todos los permisos podíamos trabajar como corresponde, no creo que se vayan a perjudicar las aguas, porque esto se trata de pequeña minería».

Según Ortega, si en algún momento se encontrara con agua, se utilizaría para puro tomar, sin industrializarla, lo cual apunta justamente al temor que tienen los habitantes de que la excavación golpee las vertientes y cambie su caudal o mismo esconda las aguas.

Roberto Mercado Aced

 

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.