Padre indignado al enterarse que asesino de su hijo fue condenado a sólo tres años y un día

• Carta de la Fiscalía le informó 42 días después de realizado juicio abreviado: Devastado y con voz quebradiza, Jorge Gatica Gallo, a través de una entrevista concedida a Diario El Trabajo, relató con rabia e impotencia esta mísera condena que favoreció al homicida tras asumir responsabilidad del crimen cometido en San Felipe, luego de la audiencia de juicio abreviado que se celebró el 14 de octubre pasado, con absoluto desconocimiento para los familiares de la víctima que se enteraron por una escueta misiva remitida desde la Fiscalía este miércoles.

Una devastadora y triste noticia golpeó a Jorge Gatica Gallo, quien es padre de Jaime Gatica Candía, asesinado con un arma de fuego en población La Escuadra de San Felipe. Precisamente ayer 24 de noviembre, se cumplieron dos años de este homicidio que dejó a dos hijas sin su padre y una familia sumida en el dolor y la amargura por la irreparable pérdida.
El pasado miércoles, don Jorge Gatica recibió en su domicilio en la ciudad de Santiago, una carta con remitente de la Fiscalía de San Felipe, en donde le comunicaban escuetamente que hace 42 días, “se ha dictado sentencia condenatoria en contra del imputado Ricardo López Rebolledo, por el delito de homicidio”, firmado por el fiscal jefe Eduardo Fajardo De La Cuba.
Para su sorpresa e innegable frustración, don Jorge se enteró por Diario El Trabajo que el asesino de su hijo, pagará sólo tres años y un día por el crimen de su hijo, pese a los incesantes esfuerzos ante la PDI y en la Fiscalía en su colaboración y entrega de informaciones relevantes para el esclarecimiento del crimen, a fin de obtener una condena que podría haber sido sentenciada por parte de los tribunales de juicio oral, a la pena de 15 años privado de libertad, considerando que ya la Fiscalía mantenía en su carpeta investigativa la prueba documental, relato de testigos e inclusive de don Jorge Gatica, declaraciones policiales y médico forense del Servicio Médico Legal, entre otros, para ser elevados en el Tribunal Oral en Lo Penal de San Felipe.
Gatica asegura que desconocía de esta audiencia de procedimiento abreviado en el Tribunal de Garantía que se llevaría a cabo el pasado 13 de octubre y de la rebaja considerable de la condena, a lo que logró optar el homicida de su hijo, quien se acreditó como el asesino.

LA SENTENCIA
Diario El Trabajo obtuvo a través del Poder Judicial, el oficio de la sentencia firmada por la Jueza de Garantía, Rocío Oscariz Collarte, quien resolvió el 13 de octubre de 2016 ante el abogado defensor, Nicolás Olivares y el fiscal Eduardo Fajardo, citando textualmente:
“El día 24 de noviembre del año 2014, aproximadamente a las 12:40 horas, en circunstancias que la víctima Jaime Adán Gatica Candia, en compañía de Froilán Guillermo Venegas Salas, se trasladan desde Santiago hasta la población La Escuadra de la comuna de San Felipe, a cobrar un dinero que le adeudaba el acusado Ricardo Alexander López Rebolledo, por concepto de droga,  quienes luego de recorrer la población en su búsqueda, divisan en una esquina a dos mujeres conversando, reconociendo a una de ellas como Nicole Ester Salinas Salinas, quien era la pareja de su deudor, procediendo a bajarse del vehículo a conversar con ambas mujeres, instantes en que llegó Fabrizio Werne Pinilla López, uniéndose a la conversación, para luego de unos minutos este último subirse al vehículo en que se trasladaba la víctima y acompañarlo a comprar unas cervezas a un local cercano. Es entonces cuando en el trayecto a la botillería, la víctima divisa al acusado acompañado de un segundo sujeto, caminando por calle Yugoslavia (calle Uno), con una escopeta recortada en sus manos, razón por la que víctima desciende del vehículo y sale tras de él para alcanzarlo a la altura de pasaje Uno, y es en esos instantes en que el acusado dispara en dos oportunidades, una de ellas directo al pecho de la víctima, hiriéndolo en su tórax, y desplomándose a pocos metros del lugar, donde falleció producto del disparo. Estableciéndose como causa de muerte ‘herida tóracoabdominal por arma de fuego’. Los hechos descritos configuran el ilícito de homicidio simple en grado de desarrollo de consumado, del artículo 391 N°2 del Código Penal”.
En resumen, Ricardo Alexander López Rebolledo alias ‘El Moncho’ tras aceptar este juicio abreviado asumiendo su responsabilidad en el crimen de Jaime Adán Gatica Candia, alias ‘El Yimmi’, fue sentenciado a la pena de tres años y un día de cárcel, descontando los 366 días que permaneció privado de libertad que le servirán como abono.

HABLA EL PADRE DE LA VÍCTIMA
– ¿Le resulta indignante una pena de tres años y un día por homicidio?
– “Siento rabia e impotencia porque yo esperaba más de la justicia, porque con el Fiscal habíamos conversado porque el caso se presentó como homicidio simple. Es para la risa, es injusto porque la Ley dice que por homicidio el mínimo deberían ser cinco años y un día a 15 años, esto fue un asesinato premeditado porque a mi hijo lo estaban esperando”.
– Se cumplieron dos años del crimen, ¿usted tenía esperanzas de un juicio oral?
– “Esperaba un juicio oral como es debido, confiaba en la justicia, yo llevé antecedentes a la PDI y la Fiscalía, porque habían otras dos personas más involucradas en el hecho, el problema mayor es que faltaban testigos”.
– El juicio abreviado benefició al acusado tras asumir el crimen
– “Lo benefició porque él cooperó y hacen algo más corto y se evitan ir a juicio oral y se limpian las manos y no seguir perdiendo tiempo. Pero a mi hijo lo mataron, no era homicidio simple, es un homicidio calificado porque estaba premeditado, lo estaban esperando para matarlo, no hubiesen andado con una escopeta en la calle”.
– ¿Ud. sabía lo que hacía su hijo, que estaba involucrado en drogas?
– “Yo me enteré un día cuando fuimos a San Felipe, yo desconocía estas amistades que él tenía, nosotros somos gente de esfuerzo y trabajo, yo fui a declarar a la PDI y más que seguro la policía nos investigaron a mí y la familia. Somos gente de trabajo, porque si no hubiéramos tomado la justicia por nuestras propias manos, pero nosotros confiábamos en la justicia, pero esto en realidad no es justicia. Independiente en lo que haya andado mi hijo, pero a él lo mataron por una deuda de drogas, pero eso no está confirmado, sólo porque lo declaró la mujer del ‘Moncho’ y ella sabe que el ‘Lágrima’ y ‘El Yayo’ estaban ese día esperando a mi hijo para matarlo”.
– ¿Cómo ha sido sobrellevar este proceso?
– “Estamos a cargo de mis dos nietas de 15 y años de edad, son sus hijas, estoy criando de nuevo porque ellas quedaron sin su padre y sin nada. Yo estoy endeudado porque todavía no he podido pagar lo que faltó para cubrir el servicio fúnebre de mi hijo, todavía debo como $600.000. Quedó con daño psicológico mi mujer, ella no se ha matado por las dos niñas”.
– ¿Hablará con el fiscal para que le explique lo ocurrido?
– “Pediré una cita para poder hablar con él directamente, consultarle en qué me ampara la ley. Estos dos años fueron en vano, me aseguraron una condena superior a siete años, pero insisto fue un homicidio premeditado, actuaron otras personas, lo estaban esperando para matarlo. Dos mujeres se prestaron para avisar que mi hijo había llegado y los otros tres lo mataron con la escopeta”.
– ¿Fue la forma correcta haberse enterado tiempo después por una carta?
– “Por supuesto que no, porque podríamos haber estado presente en ese juicio abreviado, yo me confié en el fiscal porque él nos estaba presentando como víctimas, le confié que la condena sería sobre los siete años y un día. Porque ahora la justicia da libertad condicional y otros beneficios. La justicia es para los ricos, no para los pobres y la gente trabajadora. Aquí mataron una persona, un ser humano y con la muerte de mi hijo no ven las consecuencias que dejaron con la familia, porque salimos todos perjudicados, las niñas viven encerradas, les cambió la vida y les afecta psicológicamente”.
Hasta el cierre de esta nota Diario El Trabajo intentó contactar al fiscal jefe, Eduardo Fajardo para obtener su versión de este juicio abreviado, sin obtener resultados positivos.
Pablo Salinas Saldías