Por querer salvar a su hermano, ambos murieron arrastrados por aluvión

• Horrible tragedia en sector El Manzano: En cuestión de minutos el estero que estaba seco se convirtió en un verdadero río cuyo torrente arrastró a ambos hermanos por más de 700 metros, en tanto las motocicletas fueron halladas destruidas a varios kilómetros de distancia.

Una horrible y dramática tragedia se desató en horas de la tarde de ayer en el sector El Manzano, en la comuna de Putaendo, donde dos de cuatro hermanos que salieron a pasear en sus motocicletas todo terreno, perdieron la vida al ser arrastrados por un gigantesco aluvión que los sorprendió en la Quebrada Agua del Buitre.
La tragedia comenzó a desarrollarse alrededor de las 13 horas de ayer miércoles, cuando los cuatro hermanos Bravo Cartagena (Luis, Jesús, Roberto y Juan José, todos ellos de entre 20 a 26 años), lugareños del sector que viven con sus padres y se dedican al cabrerío y labores agrícolas, aprovecharon su día de descanso y decidieron salir en sus motocicletas enduro a recorrer el cerro, por lo que se dirigieron a la Quebrada Agua del Buitre, sector al que normalmente acudían.
Según relata uno de los hermanos sobrevivientes, Jesús Bravo Cartagena, a eso de las 16 horas comenzó a llover intensamente, con mucho viento, por lo que decidieron regresar. Luis y Jesús se vinieron primero, y al cruzar la Quebrada Agua del Buitre se percataron que el estero, que normalmente está seco, en 20 minutos se transformó en un verdadero río, trayendo un inmenso caudal que hizo que Jesús cayera al agua en su moto, ante lo cual su hermano Luis acude en su ayuda y logra sacarlo al igual que la moto, luego de lo cual se dirigen a su casa ubicada en las cercanías, en pleno cerro a unos 15 kilómetros de la orilla de la carretera.
Según relata Jesús, se están bajando de las motos cuando sienten un verdadero estruendo provocado por el aluvión de rocas y piedras que caía por la quebrada, por lo que se devuelven a buscar a sus otros dos hermanos, Roberto Francisco y Juan José. Cuando están por llegar a la quebrada logran divisar a su hermano Roberto, de 23 años de edad, que estaba en medio del cauce y el agua lo estaba arrastrando, apreciando siempre a la distancia como su otro hermano, Juan José de 26 años, se devuelve y se mete al río para rescatarlo. Fue en esos instantes cuando el agua subió de tal manera que los cubrió por completo y ya nunca más los volvieron a ver.
Cabe destacar que esta tragedia golpea a una familia de mucho esfuerzo, pues los cuatro hermanos vivían con sus padres, ayudando en las labores productivas.
Tras la tragedia, hasta el lugar llegó personal de Bomberos y de Carabineros al mando del Teniente Ángelo Acevedo, quien señaló que los cuerpos fueron arrastrados unos 700 metros, quedando distantes a unos 400 metros uno de otro, en tanto las motocicletas fueron encontradas totalmente destrozadas a kilómetros del lugar.
El oficial explicó que el fenómeno se produjo porque cayó nieve y lluvia en forma abundante, lo que provocó el aluvión de grandes proporciones, con enormes masas de agua, tierra, rocas y piedras.
Al lugar también llegaron familiares de las víctimas.
El Teniente Acevedo agregó finalmente que debido al riesgo inminente de otro aluvión, pidió autorización al fiscal para mover los cuerpos del cauce para que no se los llevara una nueva crecida, trasladándolos hasta otro sector a la espera de la llegada de los peritos de la PDI y del Servicio Médico Legal, quienes hicieron su arribo alrededor de las 21,15 horas de ayer.
Marco A. Juri

Los hermanos sobrevivientes, Luis y Jesús, visiblemente impactados con la tragedia. (Fotos Patricio Gallardo)

Las motocicletas fueron halladas a kilómetros del lugar de la caída, destruidas, cubiertas de lodo y piedras.

Personal de Bomberos y Carabineros en pleno rescate de los cuerpos de los infortunados hermanos Roberto Francisco y Juan José Bravo Cartagena. (Fotos Patricio Gallardo)

Personal de Bomberos y Carabineros en pleno rescate de los cuerpos de los infortunados hermanos Roberto Francisco y Juan José Bravo Cartagena. (Fotos Patricio Gallardo)