Diario El Trabajo, en nuestro afán de dar a conocer los candidatos para las elecciones de abril de este año en el Valle de Aconcagua, presenta hoy a la profesora del Colegio Santa Juana de Arco de San Felipe, Marcela Zamora Salinas, quien va a la reelección de concejala en la comuna de Putaendo.
– ¿Cuál ha sido su trabajo como concejal en la comuna de Putaendo desde el año 2016?
– Como concejala presenté ideas innovadoras, que enriquecieron el trabajo comunal. Empoderé al Municipio en la defensa del medioambiente, que permitió la creación de esta oficina. Activé la comisión de educación para que se escucharan los principales actores. Conformé la Mesa de Prevención del Suicidio, y presenté a nivel provincial el proyecto ‘Gerópolis’, ciudades amigables con la personas mayores, para implementarlo en la comuna, siendo pioneros en la región y permitió la creación de la Oficina del Adulto Mayor en la comuna.
– ¿Quedaron proyectos sin concretar en este período?
– La primera propuesta al Concejo Municipal fue la creación de una Oficina de Asuntos Hídricos, donde todos aprobaron dicha iniciativa, pero aún no concretiza. En el ámbito cultural solicité que en calle Sarmiento se instalara un recordatorio del paso de Domingo Faustino Sarmiento por Putaendo.
En la defensa del medioambiente y el patrimonio, presenté la solicitud de dos ordenanzas municipales, la primera se refería a Las Pirkas, que están desapareciendo del paisaje rural, esto va a permitir hacer proyectos de conservación y capacitación para mantener la tradición en nuestro entorno. La segunda es en defensa del ‘sandillón’, planta cactácea de la cordillera, que debemos poner en valor y cuidar. La creación de un centro de investigación ‘El Chilón, dónde nace la vida, nace la investigación’. Estudio e investigación de los glaciares de roca, el agua, la flora y fauna de nuestra cordillera. Además de centro meteorológico, sísmico, arqueológico y astronómico.
– ¿Cuáles son las propuestas para este nuevo período 2021-2024?
– Fortalecer en la comuna de Putaendo, que cada habitante se sienta feliz, desarrolle las habilidades sociales y la inteligencia emocional, que le permitan cuidar su vida y ser el centro del quehacer comunal, partícipe de todas las decisiones que afecten a su entorno. Tener la mejor atención de salud y educación. Cuidar responsablemente el medio ambiente. Trabajar por el fortalecimiento de una economía local sostenible. Incrementar las oportunidades habitacionales. Y en general tener una vida digna como se merece cada ciudadano.