Del mundo artístico local, ‘Pepe’ Arriagada:
Si hay un artista conocido de años en San Felipe, ese es ‘Pepe’ Arriagada, quien comenzó su vida artística por allá por el año 1968. Actualmente forma parte del glorioso Orfeón de Aconcagua y como dice él, ‘pitutea’ como solista.
Lo encontramos en el centro de San Felipe y accedió a conversar con nosotros.
– Don ‘Pepe’, cuéntenos un poquito de su vida artística, cómo comienza. Muy conocido usted en San Felipe.
– Sí, mira, por allá por el año 68 más o menos, 69, empezamos con un compañero de la Escuela Industrial a hacer música. Un primo hermano me enseñó a tocar guitarra y se presenta el festival Manso de Velasco del año 69 en el Fortín Prat (…) y tuve la fortuna de ganar ese festival. Después en el año 70 en la plaza, un festival, también gané y fuimos a Santiago a representar San Felipe. Y el año 74 ya fue un festival grandote. Cinco días en el Fortín Prat, lleno a tope. Lo organizaba la radio Aconcagua y se llamaba ‘Chile canta con Chile’. El primer lugar ganaba el premio de grabar un disco single por ambos lados, y también gracias a Dios lo gané, así que tuve como un año una vida artística así. En Santiago, en los canales, presentando el disco y bueno, el disco se vendió al final, se vendía acá. Después formamos la orquesta San Felipe, ya una orquesta ‘tipín’ Cubanacán y también grabamos un casete que tenemos de recuerdo, que lo grabamos en el año 88. Así que de ahí seguí cantando solo, con pista, hasta el día de hoy. Ahora estoy con el orfeón cantando, también haciendo ritmo, tumbadoras, panderos y ‘pituteando’ solo en cualquier fiesta. Así a grandes rasgos mi vida artística.
– Oiga, pero igual, don ‘Pepe’, usted es conocido en San Felipe. Es como el gran artista local ¿o no?
– Bueno, sí, me conoce mucha gente.
– Sin desmerecer a los demás, obviamente.
– No, claro. Es que claro, junto con el ‘Pan de Leche’ somos unos de los más antiguos, y con ‘Pepa Torrejón’ que tiene el Artesanos. Juan Carlos Alvarado también todavía canta. Entonces… pero bien, si nos conoce harta gente. Es simpático. Bonito.
– ¿Cómo ha sido toda esta vida artística? Y la familia y todo.
– No, la familia se adaptó obviamente a mí, porque yo de soltero que estoy cantando, así que después me casé y seguí en lo mismo. Por ahí estuve con el Gato Blanco por ahí por el año 85 en un negocio que vendían sándwiches, qué sé yo, que llegaban todos los que venían de vuelta de trasnoche a comer ahí. Y no solo hacíamos música con el finado Raúl Navarrete, con el Juan Carlos Quezada, Miguel Villaseca, el mismo Juan Carlos Alvarado, así que era bonita, esa época, era súper bonita.
– ¿Hay harto trabajo para usted o no?
– En esos años hay harto, había harto negocio, pub. Estuve en el café La Galería, harto tiempo también haciendo pub. Sí, en este momento se me olvidan otras partes donde estuve, pero sí, harto tiempo, harto tiempo.
– ¿Le ha gustado la vida que ha llevado?
– Sí, Perfecto. Partí… mira, en el año 70 partí con ‘Los Reales’, porque era un grupo, una orquesta acá en San Felipe que estaban tocando aquí en la plaza porque había salido Allende, entonces hicieron un baile y se le enojó el vocalista y me llamaron a mí. Yo tenía 16 años. Y me preguntaron si acaso podía sacarles el pillo y yo dije «¿están las letras?» Sí, ah y cómo yo ahora dije todas las cumbias y todas esas cosas, les saqué el pillo. Les hicimos la plaza, el cuarto azul y rematamos en la ‘Flor de la Canela’ en esa misma noche, y yo con 16 años, pero fue la única vez, digamos, que hicimos ese tipo de show. Después seguimos cantando a la Palmenia y fiesta para Los Reales, también tengo esa experiencia.
– ¿Hoy día cómo está el ambiente musical?
– Está lento, pero bien. Los locales ya no funcionan en la noche, en la tarde noche. Ni siquiera con los chupes de guata. Ante sí, también. Igual, todos los negocios aquí en Coimas están cerrando a las 6 de la tarde. Buenas noches los pastores. Antes no, que la parrillada, qué sé yo en la noche, un grupo de amigos, pero no, ahora ya no ya. La cosa no está tan tan tan. Está más o menos no más, pero no me quejo.
– ¿Con los demás músicos buena convivencia?
– Sí, con los demás músicos sí. Yo por lo menos, personalmente, no tengo problemas con nadie. No soy envidioso.
– ¿Se siente un referente usted?
– Mmmm, sí, podría ser, y también nos han homenajeado la municipalidad por la trayectoria. Dos veces nos han homenajeado. Los que venimos de los años 60 y después acá en el teatro municipal.
– ¿Alguna reflexión final?
– Nada, seguir cantando hasta que me dure la garganta no más. Porque ya voy para los 70. Muchas gracias.