Suboficial aún en shock detalla agresión sufrida que le pudo costar la vida

• En entrevista con Diario El Trabajo: El funcionario policial se recupera de sus diversas lesiones debiendo ser derivado hasta el Hospital de Carabineros en Santiago, revelando los segundos de tensión tras ser atropellado por un conductor de 21 años de edad que se opuso a una fiscalización vehicular.

Aún conmocionado y recuperándose de sus lesiones sufridas tras ser atropellado por un conductor de 21 años de edad (ver información pág. 13), el Suboficial de Carabineros Carlos Salinas Saldías detalló por medio de una entrevista concedida a Diario El Trabajo, las circunstancias vividas en primera persona en medio de un procedimiento policial en la comuna de Calle Larga que le pudo haber costado la vida.
Junto con lamentar la grave falta a la integridad física y psicológica de la autoridad policial y sin provocación alguna, el integrante de la policía uniformada narró los hechos ocurridos durante la madrugada de este jueves en el kilómetro 74 de la Ruta Los Libertadores en Calle Larga, luego que el conductor del móvil decidiera embestirlo con su móvil, arrastrándolo literalmente por varios metros mientras el suboficial se sostenía en el capot del automóvil, temiendo perder la vida luego de haber terminado bajo el vehículo tras una loca carrera que culminó en una zanja.
– ¿Cómo sucedieron los hechos?
– Me encontraba junto al Carabinero Nicolás Herrera efectuando un recorrido programado por el Plan de Seguridad a los parqueaderos en el kilómetro 74 de la ruta Los Libertadores, efectuando una ronda preventiva. En ese recorrido divisamos la presencia de un vehículo que se detuvo en el interior del parqueadero, procedimos a la fiscalización efectuando un control vehicular, solicitándole la documentación personal y vehicular al conductor, el que manifestó no tenerla. Se le requirió bajarse del móvil, efectuando un chequeo de la patente, me ubiqué de frente para proporcionarle a la Central de Comunicaciones si el vehículo mantenía encargo porque esta persona no mantenía documentación.
– ¿Cómo se produce el atropello?
– Esta persona hizo que iba a bajar y aceleró el vehículo embistiéndome, no teniendo más opción que colgarme del Chevrolet Spark de color blanco y mi colega, el carabinero, trató de tomarlo para impedir que éste huyera, arrastrándonos a ambos uno 20 ó 30 metros hacia el interior del parqueadero, donde posteriormente, al ver que no había salida, se dio la vuelta en U, no permitiéndome evadir las maniobras que estaba realizando y tampoco detener sus acciones de agredir a los carabineros. Mi colega se zafó, pero yo no tuve posibilidad de poder soltarme del capot porque si lo hacía caería y me atropella más grave. Me mantuve firme, arrastrándome unos 50 metros, zigzagueando con la finalidad de intentar botarme porque temía por mi integridad física. Luego él pierde el control del móvil, cayendo a una zanja, pasándome el vehículo por encima, porque salí prácticamente debajo del vehículo y el individuo escapó por la ventana, se cayó y huyó hacia la ruta.
– ¿Pidió cooperación para la detención de este sujeto?
– Me incorporé como pude y lo seguí indicándole a mi compañero que venía detrás, solicitándole la cooperación a la Central de Comunicaciones para informar a todos los destacamentos que llegaron a prestar cooperación, haciéndose un rastreo del lugar hasta ubicar al individuo y se procedió a la detención.
– ¿Por qué cree que este conductor los agredió de esta forma?
– No se explica lo que hizo, tendría que comprobarse a través de exámenes médicos si al parecer conducía bajo efectos de drogas o alcohol, porque en el interior del móvil se encontraban botellas de cerveza que advertí antes de embestirme el vehículo.
– ¿Qué lesiones sufrió?
– Tengo contusiones, un esguince en el tobillo, erosiones en el cuero cabelludo, manos y rodillas de carácter menos grave.
– ¿Qué pasa por su cabeza mientras era arrastrado por el vehículo?
– Con la adrenalina uno queda en shock, me bajó una crisis por lo que podía haber pasado, me trasladaron de inmediato en un vehículo policial hasta el Hospital de Los Andes para ser atendido y derivado al Hospital de Carabineros donde me encuentro en estos momentos.
– ¿Temió por su vida?
– Claro que sí, vi pasar a toda mi familia en mi cabeza porque no sabía si soltarme del vehículo, porque este individuo aceleraba y aceleraba, zigzagueaba y me quería botar. No me explico la actitud que tuvo hacia mi persona, porque en ningún momento lo amenazamos ni nada, sólo fue un control de rutina. Entonces vi pasar mi vida frente a mí, además anteriormente en Calle Larga ya había sido agredido por una persona, me ha tocado presenciar accidentes de tránsito con personas fallecidas, entonces todo eso queda rondando en la cabeza, uno también es ser humano y le pueden ocurrir desgracias.
Pablo Salinas Saldías