Con una herramienta tipo martillo, un sujeto intentó este miércoles pasado al mediodía robar la joyería Arezzo ubicada en calle Prat, entre Navarro y Avenida Maipú. El rápido accionar de los dueños impidió que llevara a cabo su cometido.
El hijo de la dueña de la joyería dijo a nuestro medio el momento en que se produjo el hecho: «Estaba aquí con Julio, pareja de mi ‘vieja’, estábamos tranquilos como una rutina normal, llega un flaco moreno si no me equivoco, no tan alto, como 1,60 a 1,74, con un martillo golpeando la mampara. Yo abrí la puerta para ver qué pasaba, el flaco me intimidó con el martillo toda la onda. Julio sale, intenta encararlo, yo de la misma forma salgo con un escobillón… la verdad es que ya no me acuerdo con qué salí, un poco más allá los chiquillos se subieron a una moto y eso fue… algo súper instantáneo».
– ¿No alcanzaron a robar nada entonces?
– No, nada, solamente daños. Como le digo rompieron la vitrina, creo que fue eso, la mala onda, el mal rato; a Julio creo que le pegaron, la verdad no lo sé.
La víctima recordó el robo a la casa de cambio: «Hace muy poco se escuchó lo de la joyería de Los Andes, o sea nada que decir, más que preocupación sería enojo, rabia que te quiten lo que trabajas».
– ¿Pero están bien físicamente ustedes?
– Sí, obviamente que sí, pero aburrido de todo esto.
– ¿Ustedes ya habían sido víctimas de robo?
– Ya llevamos cuatro robos; el primero fue un asalto con arma, el segundo fue en la noche-madrugada en camioneta, después con el tema del estallido social rompieron y ahora esto. ¿Qué se espera más adelante?
Dice que tienen cámaras en el local vigilando las 24 horas: «A las personas que vienen acá y rompen, les conocemos las caras, pero puedes saber nombres, caras, quién es la persona, puedes saber la calle, uno puede decir este flaco fue el que me robó y esto, ¿qué puedo hacer con eso», señaló la víctima.
– ¿Mayor vigilancia?
– Fiscalía los suelta (dice la madre), si no sé cuál será el modus operandi de allá, tendrían que estar adentro y los veo en la calle.