- Jaime Moraga Araya, de 55 años de edad, falleció víctima de intensa inhalación de monóxido de carbono al interior de su vivienda ubicada en la villa Santa Teresa de Llay Llay. Primeras diligencias de la PDI indicarían que el fuego se habría originado por una vela encendida a imagen religiosa.
Víctima de una asfixia por inhalación de monóxido de carbono y con un 50% de quemaduras en su cuerpo, falleció un hombre de 55 años de edad identificado como Jaime Moraga Araya, tras un voraz incendio que consumió en su totalidad dos viviendas, afectando a otras dos que resultaron con daños de consideración, ubicadas en el pasaje Victoria de la villa Santa Teresa de la comuna de Llay Llay.
El lamentable hecho se originó pasadas las 04:30 horas de la madrugada de ayer domingo, cuando las llamas rápidamente comenzaron a propagarse por la vivienda donde residía el actual occiso y cuyo origen habría sido una vela que se encontraba encendida junto a una imagen religiosa.
El siniestro comenzó a desatarse mientras los residentes se encontraban durmiendo, y tras la inhalación del tóxico humo, Jaime Araya falleció de manera instantánea sufriendo además heridas producto de las llamas que quemaron su cuerpo, sin lograr que familiares lo pudieran salvar.
La propagación del fuego comenzó a destruir en segundos una vivienda vecina donde residen familiares del malogrado hombre, dejando como consecuencia a más de ocho personas literalmente en la calle, tras la pérdida total de ambos domicilios que resultaron calcinados.
Personal de Bomberos de esa localidad trabajó arduamente en el combate de las llamas que amenazaban a otros inmuebles, causando gran conmoción entre los vecinos que resguardaron sus enseres materiales llevándolos hasta la vía pública, por el temor de aumentar las víctimas de este trágico incendio.
Sin embargo, la brutalidad del siniestro dejó como resultado dos viviendas completamente calcinadas con pérdida total y otras dos con daños de consideración menor habitable, según la evaluación que resolvió la dirección regional de la Onemi.
Controlada la emergencia, concurrió al lugar el fiscal de turno junto con los peritos de la Brigada de Homicidios de la Policía de Investigaciones de Los Andes para iniciar las diligencias que establecerán en primera instancia la causa de muerte de este vecino.
El Comisario de la policía civil, Gino Gutiérrez afirmó a Diario El Trabajo que tras la revisión superficial al cuerpo del occiso, éste no presentaba intervención de terceras personas en el fallecimiento, estableciendo como causa de muerte la asfixia por inhalación de monóxido de carbono, la que deberá ser confirmada tras la autopsia de rigor.
“Bomberos acude al lugar, extingue el siniestro afectando también a otra vivienda que también son familiares, con pérdida total. Se trabajó en el sitio del suceso, estamos hablando que la causa de muerte fue asfixia por monóxido de carbono y el origen del incendio fue accidental, ocasionado por una vela. Se trata de una muerte accidental, no hay participación de terceros, no obstante hay que esperar el resultado de la autopsia”.
Gutiérrez agregó que tras este procedimiento en el lugar de los hechos de acuerdo a las pruebas testimoniales, las pericias fotográficas, planimetría, mecánico y químico de la PDI, los indicios en el cuerpo descartarían la ocurrencia de un eventual homicidio.
“Esta persona no logró salir del inmueble y la combustión de artículos sintéticos y plásticos que emanan gases tóxicos y la combustión de la madera provocaron su deceso tras la inhalación. La persona que residía con el actual occiso resultó con quemaduras en su cuerpo de menor consideración”, concluyó el jefe de la Brigada de Homicidios.
Pablo Salinas Saldías