Con un pálido empate en blanco que no hizo nada más que ratificar la pésima campaña global de la temporada, Unión San Felipe se despidió del Torneo 2021 de la Primera División B del fútbol profesional chileno. Lo más destacado de la jornada sabatina fue el constatar que pese a que la campaña albirroja estuvo muy, pero muy por debajo de lo esperado, ver que al Estadio Municipal llegaron más de 500 espectadores a brindar su irrestricto apoyo a un grupo de jugadores que semana tras semana se encargaron de entregarles más penas que alegrías.
Del partido en sí no es mucho lo que se puede escribir o comentar, ya que ambos equipos no mostraron demasiado, salvo unas que otras arremetidas que perfectamente pudieron haber determinado romper el cero, pero los delanteros no tuvieron la capacidad o fineza para enviar el balón al fondo de las porterías custodiadas por Lucas Giovini y Gastón Rodríguez.
La nota o acción más destacada del pleito, fue la expulsión del extremo sanfelipeño Gonzalo Reyes, quien aparentemente por un intercambio verbal con el juez Matías Quila, vio la cartulina roja, dejando en inferioridad de condiciones a un Uní Uní que desde ese instante sólo se dedicó a ceder la iniciativa al visitante para encontrar los espacios suficientes como para hacer un gol, cosa que por supuesto no ocurrió, por más que Bairo Riveros y Julio Castro hicieran todo el esfuerzo por dañar al rival.
En su última presentación de este 2021, que marcó el fin de un ciclo para varios jugadores, Unión San Felipe alineó de la siguiente manera: Lucas Giovini; Francisco Salinas, Matías Silva, Jesús Pino, Yerko González; Leandro Fioravanti (José Vargas), Enzo Ormeño, Alejandro Azócar (Bastián Muñoz), Bairo Riveros (Ricardo Rosales), Gonzalo Reyes y Julio Castro.
Unión San Felipe terminó en el puesto 14º de la tabla de posiciones, con 33 puntos, superando a Cobreloa y Barnechea, club que descendió a la tercera categoría del balompié rentado nacional.
