Por la tercera fecha del campeonato de ascenso chileno, Unión San Felipe logró imponerse por la cuenta mínima, y en las postrimerías del partido, a un discreto e igualmente porfiado cuadro de Deportes Antofagasta.
Para el conjunto sanfelipeño, la tarea principal era sacar adelante como fuese el desafío que representaba el conjunto nortino. El pésimo arranque de torneo, que se traducía en dos ‘feas’ caídas ante San Luis y Barnechea, obligaba a los dirigidos de Germán Cavalieri, a ganar. Con eso, empezarían a despejar dudas, además de atraer importantes cuotas de calma.
El cotejo disputado en el estadio Municipal, congregó a poco más de 700 espectadores, los que fueron testigos de un lance con pocas luces en lo futbolístico a raíz que ambos equipos todavía no se ven del todo fino a la hora de darle una buena circulación al balón.
En los primeros 45 minutos, Unión San Felipe, se vio muy impreciso, tanto así, que recién a los 42’ pudo llegar con algo de riesgo sobre el arco custodiado por el arquero Tomás Giménez. En esa etapa, el conjunto aconcagüino basó prácticamente todo su planteamiento ofensivo, en pelotazos intrascendentes que no hicieron mayores estragos en la última línea visitante. Parte del repertorio ofensivo en ese lapso recayó también en hombres habilidosos como Nahuel Luján y Mario Briceño, los que a intervalos lograron hacer contacto con la pelota gracias a que Hugo Herrera -el mejor de la cancha- les entregaba pases ‘limpios’.
La necesidad de ganar y la presión que surgió desde la popular (galería) tras el 0 a 0 del primer tiempo, obligó a Cavalieri cambiar de estrategia para el complemento. Así, apenas el juez Cristián Galaz (buen arbitraje), dio por reiniciadas las hostilidades, se observó de inmediato a un Uní Uní parado en campo rival, situación que descompuso a los forasteros. Antes de los 5 minutos, los dueños de casa se habían creado dos oportunidades, siendo la más clara, una de Briceño.
Esas posibilidades hicieron crecer la convicción del triunfo entre los sanfelipeños. Hugo Herrera demostró que debe ser titular al convertirse en un verdadero barómetro, dándole equilibrio al equipo al mantener conectadas las líneas sanfelipeñas. La función táctica del ex General Velásquez, fue simplemente impecable, además de permitir a Gonzalo Espinoza moverse de manera más libre.
Con un Antofagasta refugiado en campo propio, sumado a un San Felipe ganoso, pero sin mucha claridad, el lance fue acercándose en blanco a su final. Sin embargo, antes que eso sucediera, faltaba lo mejor de la tarde, y es que el único gol que registró el pleito fue un golazo. Centro perfecto de Briceño que capturó de manera soberbia Gonzalo Jara, quien con su zapatazo en el 84’ dejó sin la más mínima opción a Giménez, desatando la algarabía en la cancha y la tribuna.
Primeros tres puntos albirrojos en el campeonato. Ahora, se viene un periplo de terror, debido que deberán jugar cuatro partidos seguidos como visitantes, salidas en las que entre otros deberán medirse contra Wanderers e Iquique.
Unión San Felipe formó con: Pablo Heredia en el arco; Enzo Ormeño, Nicolás Garrido, Christian Cepeda e Ítalo Müller, en defensa; Gonzalo Espinoza, Gonzalo Jara y Hugo Herrera, en la zona media; quedando en labores ofensivas: Diego Plaza, Nahuel Luján y Mario Briceño. Posteriormente ingresaron Matías Sandoval y Franco Sosa.
