PUTAENDO.- La Sra. Marianela Gallardo Lobos, lleva más de cuatro años esperando la orden para practicarse una resonancia magnética solicitada por un traumatólogo en carácter de urgente, en el Hospital San Juan de Dios de Los Andes.
Esta vecina, quien reside en Guzmanes, quiso contar esta situación asegurando que en 2010 sufrió un grave accidente de tránsito junto a su familia, en el que resultó con varias fracturas y con un golpe en su columna, mismo que la llevó a estar varios meses totalmente inmovilizada.

MISMA RESPUESTA
El traumatólogo que la atendió solicitó en forma urgente una resonancia magnética al Hospital de Los Andes, en donde según Marianela Gallardo, le indicaron que la llamarían a la brevedad, pues ese examen era de urgencia.
Gallardo sostuvo que a medida que pasaron los meses durante el año 2011 y al ver que su estado de salud se deterioraba cada día más, insistió en varias ocasiones en el Hosla y la respuesta siempre era la misma «debe esperar, porque en cualquier momento la llamaremos».
Marianela Gallardo por sus propios medios debió pagar más de $130.000 y se realizó una resonancia magnética, que arrojó que presentaba una fractura en la vértebra T6 y luego acudió a un médico particular, quien afortunadamente pudo iniciar un tratamiento y así evitar que la lesión aumentara y le generara un daño mayor.
Si bien es cierto esta vecina gracias a ese tratamiento y al paso de los años, prácticamente hoy está recuperada, su testimonio grafica lo que muchas personas han vivido y viven con estas largas esperas para practicarse un examen o ser atendidos por un especialista.
Marianela Gallardo aseguró que quiso entregar su testimonio, pues hasta la fecha nunca la han llamado e indicó que lo que más le impacta, es conocer muchos casos, sobre todo de adultos mayores y de escasos recursos, quienes incluso han fallecido esperando un examen o una atención médica, por lo que expresó que es una realidad que muchos no quieren ver o que desconocen, pero que en Putaendo son varias las personas que llevan años esperando una derivación o un especialista, sin que ninguna autoridad haga algo al respecto para tratar de revertir una situación, que como en su caso, al parecer a muy pocos le importa y sólo los que logran tener la suerte de juntar el dinero pueden costearse los exámenes de manera particular. Finalmente Gallardo declaró que si hubiese seguido esperando el llamado y si no hubiese realizado el tratamiento de manera particular, lo más probable es que hoy estaría inválida.
Patricio Gallardo M.