SANTA MARÍA.- La comunidad de Jahuel nuevamente enfrenta la tensión por el posible ingreso de una minera a su sector. Esto después que se supiera que existe una demanda interpuesta por una sociedad minera para una servidumbre de paso para trabajar Mina Aguas Claras. Y no es para menos, ya que la actitud del propietario de la mina, José Ortega, está llevando a que el pueblo jahuelino pierda la paciencia. Ortega, a sabiendas del grave problema hídrico que enfrenta el sector, se empecina en trabajar esta mina que se encuentra justamente sobre las napas que abastecen las conocidas y valoradas vertientes de Las Cortaderas, cuya agua pura y cristalina de conocidos valores medicinales abastecen el sistema de agua potable del Zaino, Jahuelito, Tabolango y Lo Galdámez.
Y en el mismo sector pasa la totalidad de la escaza agua de regadío del todo Jahuel. Cabe destacar que este último recurso destinado a riego esta tan mermado, que se alcanza a regar apenas un 10% del área antes irrigada. Ya son muchos los pequeños productores que debieron buscar trabajo apatronado ya que la producción ha decaído a niveles insostenibles. Esta es la razón por la cual los jahuelinos no están dispuestos a permitir faenas mineras en su territorio y menos ahora que se encuentra en pleno proceso de declarar Santuario de la Naturaleza un área de 7.050 hectáreas, incluido el sector donde pretende instalarse a sus faenas la nueva minera.
El Presidente de la comunidad de Campo, Rubén Muñoz, manifestó que se utilizaran todos los recursos para impedir dicha faena pero sobre todo que no puede entender la obstinación del Sr. Ortega de trabajar una mina que esta sobre napas subterráneas y enclavada en pleno cajón del paso de las aguas, cajón que en ese punto no tiene más de 50 metros de ancho: “No puedo entender la falta de humanidad del Sr. Ortega, con quien hemos tenido varias reuniones donde le hemos manifestado nuestro rechazo a su faena y nuestra intención de proteger nuestra agua, Como no va a entender que aquí viven familias que dependen totalmente de eses recurso y que , debido a la sequía, por primera vez en sus vidas han vivido razonamiento de agua potable y restricción en el riego”. Cabe destacar que la entera comunidad y, la gran mayoría de la población de Santa María están de acuerdo en evitar el trabajo de las mineras e incluso consideran una burla a los residentes y a la comuna esta intención, justo ahora que con gran esfuerzo se trabaja para la declaratoria de Santuario de la Naturaleza. Cabe preguntarse qué responsabilidad le cabrá al Sr. Ortega por esta evidente provocación que lleva a cabo y las consecuentes repercusiones que va a tener éntrelos habitantes de Jahuel que no están dispuestos a poner en jaque el escaso y único recurso hídrico que poseen en un área considerada de las más afectada en la región por la sequía. Incluso, en inspección en terreno se constata la Laguna del Copín totalmente seca, las vertientes de La Higuera secas, las vegas del Copín sin agua e incluso la Aguada de la Virgen en los Terrenos fronterizos de la Serranía de Rinconada de Silva sin agua superficial, aguadas que fueron históricamente fuente de refresco para viajeros y ganado.
Roberto Mercado Aced