El entrenador argentino Pablo Álvarez es categórico en afirmar que tanto él, como el resto del cuerpo técnico que asumió la conducción del primer equipo del Uní Uní, no tienen el más mínimo temor de hacerse de este verdadero ‘fierro caliente’ que es el cuadro albirrojo.
Álvarez, quien en sus labores habituales se desempeña como jefe del fútbol formativo de los sanfelipeños, ve como una buena y linda oportunidad ponerse al frente de una tarea titánica, que tendrá características de épica. «Es motivante conducir hasta el fin de la primera rueda. Tanto yo, como el profesor Ricardo (González), Patricio Rivera y el staff del fútbol formativo, vemos en esto una linda y desafiante oportunidad», declaró.
Está muy claro que los objetivos serán a muy corto plazo, cosa que el estratego dejó muy en claro. «Todo punto que podamos lograr será muy importante. Este es un desafío para todos. Acá a nadie le conviene que el equipo se vaya al descenso, por lo que todos debemos ver esto como un lindo desafío. Si tenemos como antecedente los últimos partidos, el equipo no está lejos de los buenos resultados. Estoy convencido que lo psicológico es lo que hay que trabajar, ya que los chicos deben saber que pueden ganar los partidos», señaló.
Consultado sobre cuál era el motivo que los animaba a esta tarea, Pablo Álvarez respondió: «Queremos darle una mano a la institución. Durante estas semanas de trabajo intentaremos cosas positivas. Es evidente que el jugador está golpeado en lo anímico, es por eso que los acompañaremos para que puedan salir de este momento tan angustioso por el que pasamos».