Denuncia grave ataque homofóbico a su hermano en Los Andes

Mujer invoca ‘Ley Zamudio’:

Dejaron a la víctima con su cara desfigurada.-

María Yolanda Miranda Vivanco se encuentra viviendo una dramática situación con su hermano homosexual Óscar, de 52 años de edad, quien fue agredido y herido gravemente el pasado domingo 26 de enero en la madrugada, alrededor de las 06:00 horas. Según el relato, la golpiza habría sido protagonizada por tres personas en el edificio Paseo Andino, que está al costado del Paseo Urbano en avenida Santa Teresa con Chacabuco, Los Andes.

A consecuencia de esta brutal agresión, Óscar quedó grave, con múltiples fracturas tales como una craneal, además de desfigurar su rostro. Todo esto se habría originado, según su hermana, debido a su orientación sexual.  En esta línea, se hizo en la denuncia en Carabineros y entregó pruebas, invocando la Ley de no discriminación, mejor conocida como Ley Zamudio.

Yolanda se enteró de esta situación mediante un llamado telefónico en el que le informan que su hermano estaba grave en el hospital. Cuando llega al recinto de salud pensó que se trataba de un asalto, hecho que no podía determinar ya que Óscar dentro del hospital perdía y recuperaba el conocimiento. Es en uno de esos momentos de recuperación, que les mandó un mensaje por WhatsApp: «me atacaron tres tipos en tal parte y estoy mal, me destruyeron la cara», y se toma una foto.

Debido a la gravedad de la situación se hace asesorar con un abogado, quien lo primero que le menciona era hacer era la denuncia en Carabineros y lo hizo con un funcionario que llegó al hospital por otros incidentes que hubo ese día. Este le comunicó que el lunes debía estar en Fiscalía, porque allá envían los partes.

Otra cosa que le aconsejó el abogado, fue que concurriera al lugar donde se origina el hecho, que tomara fotos y grabara, y que buscara cámaras, pruebas, porque a veces pasa tiempo y se borran. Pues bien, encontró una grabación y en base a esas imágenes nos relata lo sucedido a su hermano.

En este contexto, logró llegar a la conclusión de que no se habría tratado de un asalto, sino que «fue  un ataque homofóbico, mi hermano es gay, él iba cruzando la calle y apenas lo hace; no sé, había caminado unos diez pasos por decir, cuando va por la mitad tres personas que estaban en el edificio, justo a la salida donde hay dos locales comerciales, bebiendo en la vía pública, empiezan a increparlo, a insultarlo, decirle cosas por su condición, etc».

¿Por qué crees usted que es un ataque homofóbico, lo insultaron?

– Claro, yo lo veo como mi hermano y a lo mejor camina de una manera amanerada, porque él venía sólo, cruza la calle y ellos empiezan a increparlo: ‘oye tal por cual’.

¿Qué le dijeron textualmente?

– Textualmente, ‘pelado concha… maric…’ y mi hermano los mira y dice ‘qué miras, acaso te gusto’ y empezaron a increparlo con muchos garabatos: «Me dijeron de todo». Yo le pregunté si los conocía, me respondió que no los conocía, nunca los había visto a ninguno de los tres; «de la nada me empiezan a increpar». Llegó un momento en que fue tanto, que se devuelve a encararlos: «por qué me están agrediendo, si yo no los conozco, cuál es su problema, qué problemas tienen conmigo, por qué me agreden (verbalmente)». Dice que se reían y había uno que trataba de calmar, pero al final era todo un juego de ellos.

Él dice que cuando habló con ellos se notaba que no eran ‘flaites’, que no andaban mal vestidos y el asunto es que cuando se devuelve, siente como que le tiran algo, ahí se ve en la cámara que vuelve y uno piensa ¿para qué te devolviste?, pero uno no sabe todo lo que le estaban diciendo o que cosas pasaron. Hay una parte que la cámara no toma, porque ellos están como detrás de una muralla por costado, yo le digo (a Óscar) qué pasa ahí; (responde) «ahí me increpan, yo salgo como a buscar piedras, algo para tirarles, porque estaba tan enojado con todo lo que me estaba pasando de la nada, gratis, ni siquiera los conocía, me odiaban, lo veía en sus caras, odio parido».

Dice que se acerca a tirarle a uno una piedra chica y ahí se abalanzan, comienzan a pegarle de patadas y puños, lo aturden, lo dejan inconsciente a medio metro del portón de la salida del edificio. Afortunadamente está grabado todo, lo siguen golpeando, pero siempre fue sobre su cara, patadas, combos, toda la cizaña que tenían ellos era en su cara. Mi hermano no tiene ningún hematoma en el cuerpo, excepto el hombro, pero toda la cara se la destruyeron, si fue con ensañamiento, eso es lo que no entiendo.

Todavía no entienden como familia por qué se devolvió hacia los sujetos, a lo que su hermano les respondió: «¿por qué de la nada tengo que permitir que ellos se crean dueños de la calle?, por qué me odian si a ellos no les he hecho nada, ni siquiera los conocía; no sé si me conocían de antes, no tengo idea, pero yo nunca los vi», indicó Óscar.

 

SE ECUENTRA DE ALTA 

Actualmente está de alta médica, «por un milagro, los doctores no explican cómo evolucionó bien, porque lo más grave era donde le habían fracturado arriba la frente, tenía compromiso craneal. Yo tengo todos los papeles, era como un sangrado intracraneal, los doctores dieron el pase para que en tres días más o menos del día del ataque, eso había drenado y solamente quedaba aire en la lesión, por eso permitieron que los maxilofaciales lo metieran a pabellón el día jueves, me parece, y le reconstruyeron toda la cara, le pusieron platinos, placas. Dice el doctor que hay unos huesos que ya se perdieron, se molieron, pero a mi hermano lo reconstruyeron completo, tengo todos los papeles que le hicieron», comentó María Yolanda.

Este día sábado su hermano se sintió muy mal, estuvo durmiendo prácticamente todo el día, «porque cuando salió del hospital estaba con medicamentos a la vena, ahí se sentía bien no percibía dolor, pero ayer (sábado) no fue un buen día, estaba decaído, no se podía levantar. Le explicábamos que lo de él había sido grave. No se acuerda, no sabe la cantidad de golpes que le propinaron en la cara, porque  pierde el conocimiento».

Cuenta que hicieron la denuncia invocando la Ley Zamudio en base a lo que le dijo un caballero, que la atendió muy amable; la orientó en cómo hacerlo, «porque yo fui a buscar el parte, de ahí empieza la denuncia que tiene que llegar a Fiscalía a través de Carabineros, PDI, y cuando eso llega uno puede adjuntar los antecedentes y el día lunes a primera hora estuve esperando; llegó y me toma la declaración, y yo había hecho varias diligencias por lo que me había aconsejado el abogado», señaló.

También le dieron un correo y luego al día siguiente le entregaron un formulario para llenar, donde incluía toda la evidencia.

Confiesa que como familia están mal, destruidos, porque nunca pensaron, en particular ella, que las personas pueden llegar a tanto por homofobia hacia una persona, «de condición sexual diferente, uno piensa como que la gente lo ha aceptado, pero no es así, hay personas que realmente están enfermas, necesitan tratarse, porque yo entiendo que puede haber una riña, incluso que se pueden ir a golpes, pero si yo veo que estoy golpeando a una persona que ya está inconsciente y sigo agrediéndola sin parar, hasta que pasa un auto y dejan de pegarle, porque claro, había una evidencia, testigos que los iban a ver que estaban agrediendo a mi hermano ya inconsciente. Eso los detuvo, no lo hizo la consciencia, ‘oye, no le peguemos más’. De hecho, ellos después miran alrededor como diciendo ‘¿habrá alguien más?’ y ahí miran a la cámara, donde sus rostros se ven nítidamente».

Admite que el motivo de hacerlo público es para que no le pase a nadie más, «que se haga un llamado, a lo mejor que en Los Andes haya mayor seguridad, no sé que espero de la gente, porque en realidad no sé cómo llegar a ellos y decirles que puede ser hermano, un familiar con una condición que no merece agresión ni verbal, porque uno tiene que tener un respeto por todas las personas; o sea, uno como ser humano necesita ser respetado, si yo respeto a las personas ¿por qué me tienen que agredir de la nada? Hemos visto en las noticias, es lo mismo, porque vieron su condición, era amanerado, habló raro; lo increpan, lo golpean y por qué siempre le pegan en el rostro, es a matarlo, por último darle un escarmiento, me entiende. Es un odio desenfrenado que la verdad no me lo explico, no es algo oculto como antiguamente, sino que es algo que se ve constantemente en mujeres y en hombres, no lo entiendo, de verdad», concluyó.

Al finalizar, pide públicamente que «atrapen a estos delincuentes, que mi hermano tenga justicia».

Óscar, la víctima, envió esta foto a familiares, contándoles que lo habían atacado tres sujetos. A la derecha, ya dado de alta, con secuelas en su rostro por la brutal y cobarde agresión.
Óscar, la víctima, envió esta foto a familiares, contándoles que lo habían atacado tres sujetos. A la derecha, ya dado de alta, con secuelas en su rostro por la brutal y cobarde agresión.
Este es el certificado que acredita las heridas y tratamiento médico recibido.
Este es el certificado que acredita las heridas y tratamiento médico recibido.
Previous articleDetienen a delincuente que portaba armas blancas y droga