Para este sábado 4 de mayo está previsto realizar un encuentro ranchero bailable a beneficio de Nicolás Tapia Pizarro, joven de 22 años de edad que está luchando día a día contra un cáncer. De todas maneras nos informan que fue sometido a un trasplante de médula.
Su mamá, Lorena Pizarro, recordó el drama que vive su hijo, quien cumplirá 23 años en el mes de julio; «su cumpleaños lo pasó en el hospital, éste esperemos que no; él está batallando día a día con un cáncer, hace 90 días le hicieron un trasplante de médula, su primo Javier fue el donante; gracias a Dios hubo un donante a tiempo en la familia que para nosotros es un milagro. Resulta que él no ha progresado bien, lamentablemente él no ha ido con la rapidez que el doctor en realidad quería. Ha sido un progreso súper lento, además él arrastra una diabetes lo cual complica todo eso, cualquier mejoría, la diabetes es enemiga».
Agrega que están «constantemente viajando a Santiago, a sus controles. Si el doctor dictamina que tiene que viajar 2-3 veces en la semana, se tiene que hacer. No puede tener contacto con la gente, entonces tenemos que hacerlo en auto, lo cual sale bastante caro, muy caro. Si él tiene algún malestar equis, se lo explico al doctor en la mañana, él me dice inmediatamente tráigalo, da lo mismo la hora, todo, «tráigalo». Nos ha pasado que hemos tenido que ir, a parte de los controles normales, ‘soplada’ con él a exámenes, a que lo vea el médico, entonces todo esto tiene un alto costo para nosotros como familia ; o sea, para mí en realidad, yo soy sola, el papá de él es poco lo que ayuda porque también está enfermo. Yo tengo que saber tener para todos los gastos del viaje, darle de comer allá, más lo que gasto acá en la casa por su alimentación, porque hay que comprarle cosas sin lactosa, quesos que digan 6 láminas, sus comidas no pueden estar más de 2 días en el refrigerador; o sea, si yo le compro queso, él puede comer hoy día y mañana y ya, al día siguiente ya no, sea con lo que sea. Las comidas también tienen que ser frescas, del momento, entonces para mí es un alto costo; sus yogurt, leches son todas sin lactosa. Le estaba comprando una leche Ensure en botellita, me sale 12 ‘lucas’, vienen 4 apenas».
Agrega que fue «a la municipalidad a rogar por ayuda, hace dos meses mandé una carta, también a la señora alcaldesa, si me podía dar un permiso provisorio para vender cosas en mi casa, porque tampoco quiero que me regalen, toda mi vida he trabajado, he salido adelante, entonces no me gusta que me regalen las cosas, a mí me gusta ganármelas. Me llamaron como a los tres días, yo estoy hablando de hace dos meses, que me iban a ayudar, me iban a colocar en fomento productivo… hasta ahí nomás llegó. Que me iban a ayudar con un traslado al mes con el Nico, por último no pasó nada. Fui a Dideco a pedir ayuda, quedaron de llamarme en dos días para ver si me podían ayudar con un vale de gas, todavía espero el llamado. Ya empezaron los fríos, eso significa que tengo que saber tener un tubo casi a la semana, depende del rato que le coloque la estufa».
Hay momentos en que debe viajar de inmediato a Santiago a buscar algún remedio para su hijo.
Finalmente nos dice que para eso es este beneficio, para que su hijo tenga todas sus cosas.
Reiterar, pasado mañana, sábado 4 de mayo en el sector de 21 de Mayo, frente al colegio, desde las 19:00 horas.
Valor de la entrada $ 1.000.