- Falleció después de once días hospitalizado en el San Camilo.-
La música en San Felipe está de luto y la comunidad consternada tras conocerse el deceso a los 64 años de edad, del querido Carlos Libbrecht Vergara. El ‘Hombre Orquesta’ como era conocido, falleció este lunes tras estar hospitalizado durante once días en el Hospital San Camilo de nuestra comuna.
Diario El Trabajo se hizo presente en el lugar de su velatorio, en este caso, en la sede de la Asociación Gremial de Dueños de Camiones (Asoducam), ubicada en Avenida Chacabuco. En este contexto, conversamos con su hija Bárbara.
Al iniciar la conversación, le entregamos nuestras condolencias como medio de comunicación ante tan sensible pérdida. Luego, admitió sobre la muerte de su padre que «mi papá fue una persona cariñosa, solidaria, jamás le escuché un ‘no’ si le pedías ayuda o alguna cosa. Esa es una de las principales características, que a mí papá lo destacaba su cariño, su solidaridad», señaló.
– ¿Qué le pasó? Sabemos que murió, pero mucha gente decía que no tenía idea que estaba en el hospital
– Exacto, muchos me decían que no sabían que estaba enfermo. Mira, yo creo que fue un tema de descuido solamente, mi papá no era bueno para el tema de los médicos y esas cosas, así es que en ese sentido podemos decir que era un poquito ‘porfiado’. Al final se le produjo un tema de arritmia y eso empezó a generar distintas complicaciones que empezaron a afectar su salud, seguido de un paro que le vino y ya de ahí no había nada más que hacer y solamente esperar.
Carlos estuvo hospitalizado once días. «Eso es lo curioso, estuvo once días y el día 11 de agosto falleció», precisó.
– Ustedes como familia ya estaban admitiendo que él se iba, por el posteo tuyo. ¿Eso te lo dijeron los médicos, algo así?
– Mira, primero me lo dijo mi papá. Yo ayer (lunes) en la mañana conversé con él; él estaba lúcido, solamente que estaba presentando mucho dolor y estaba preocupado de ciertas cosas que ahí lo conversamos en su momento… las preocupaciones que él tenía. Pero se fue tranquilo, se quería ir, ya no quería dejar ‘cachos’, no quería dejar preocupaciones acá. Así es que seguido de eso, los médicos nos dijeron que iban a tomar los últimos exámenes, ver la posibilidad de trasladarlo a la UTI, pero al final no fue necesario por el paro que le vino, y ahí ya los siguiente exámenes arrojaron que no había nada más que hacer y solamente que llegara toda la cantidad de gente posible antes de aplicarle la morfina, para que nos pudiéramos despedir, porque a las próximas horas se iba a ir.
– ¿Cuál es el recuerdo que les va quedar a ustedes cómo familia?
– Yo creo que mucha gente, como te dije anteriormente, lo quería por su solidaridad, la buena y amorosa persona que era.
– ¿Con ese recuerdo te quedas?
– Sí.
– ¿Qué te parece ese apodo del ‘Hombre Orquesta’ de San Felipe?
– Es que era él (se ríe).
– La gente lo conoce así y dice ‘se nos fue el hombre orquesta de San Felipe’
– Así es… sí, con harto cariño nomás, pero sé que mucha gente quería lo mucho y admiraba bastante a mí papá.
Cuando conversamos con Bárbara, su padre estaba siendo velando en Asoducam, y sus restos serán depositados en Parque Auco en Rinconada de Los Andes.
