En una reducida cita a la cual solo tuvieron acceso los medios de comunicación con más historia y tradición de la ciudad, el empresario argentino, Raúl Delgado, realizó un descarnado relato, en el cual expuso la delicada situación económica por la que atraviesa Unión San Felipe, indicando además que lo ideal sería que se concrete la venta del Uní Uní, cosa que pudiese ocurrir a raíz que existen conversaciones con un interesado.
Al inicio del encuentro, el directivo sostuvo que, «hasta este momento el club sigue bajo nuestra propiedad; el club está siempre a la venta. En la actualidad hay un interesado, pero no sabemos si se va a concretar», explicó.
Respecto a si fue verdad que hubo negociaciones que estuvieron a punto de concertarse, dijo: «Tuvimos muchas negociaciones con dos interesados, pero fue imposible concretarlas. Es más, una de ellas realmente fue muy desagradable, porque cuando ya habíamos quedado de juntarnos en una notaría para finiquitar el acuerdo, 45 minutos antes de la hora acordada la persona nos manda un mensaje que no tenía los vale vista para la promesa de compra. Hubo otras, todos chilenos, pero nunca se llegó a un acuerdo, ya que siempre decían sí y después no», relató el empresario.
Tal como meses atrás lo señalara a Diario El Trabajo, Delgado ratificó que se hace imprescindible que llegue otro controlador al club sanfelipeño. «Interpreto que los mejor que le puede pasar a Unión San Felipe es que venga una persona con nuevas energías y recursos, porque de esa manera le permitirá al club pelear por cosas importantes».
El dueño del Uní Uní, no se anduvo con rodeos al señalar una realidad que puede ser incómoda. «Nosotros no estamos en condiciones de armar un plantel lo suficientemente competitivo como quisiéramos y lo venimos sufriendo durante las últimas temporadas, en la cual solo nos hemos salvado por errores de algunos rivales.
«Ahora esto me está complicando en mi situación patrimonial, por lo que si debo quedarme, el plantel se armará solo dentro de las posibilidades económicas que tenga el club. Hoy por hoy hay clubes que pagan barbaridades y los controles no funcionan, y para sostener un club de las características de Unión San Felipe hay que poner mucho dinero», contó.
Sobre cómo se llegó al momento económico actual, Raúl Delgado explicó que «no tengo ningún problema con el fútbol femenino, eso quiero dejarlo muy claro, pero cuando a uno se le obliga a generar más recursos para algo que no entrega recursos es muy difícil, porque el fútbol femenino significa un gasto de $100.000.000 (cien millones de pesos). A eso hay que agregar el descuento que se aplicará por el juicio que la ANFP perdió con TNT, se sumará otro descuento de $110.000.000 (cuento diez millones de pesos), y a todo esto se sacarán unos 40 ó 50 millones de pesos por el fútbol formativo, entonces, hablamos que de los ingresos que había por televisión nos restarán 250 ó 260 millones de pesos al año. Es muy claro que es imposible recuperar ese dinero y solo me quedará ponerlos yo, pero la verdad ya estoy cansado de ponerlos».
Raúl Delgado fue enfático sobre que él no quiere irse porque sea un deseo de dejar la ciudad, sino que esto responde a la imposibilidad de seguir sosteniendo esta empresa. «La gente debe tener en claro que con el público que va al estadio y el nulo apoyo en materia publicitaria es imposible competir contra instituciones que por esos conceptos generan entre 600 y 1.000 millones de pesos por año, entonces, claramente a ellos no les afecta tanto reducir 250 millones. Es lapidario, y es por eso que la intención mía de vender el club se debe a que de ello depende que se mantenga en el fútbol profesional», cerró el actual propietario del club.






