‘Nadie dijo que sería fácil’, es una frase que generalmente suele aplicarse cada vez que alguien inicia una empresa de características complejas y difíciles de realizar; tal como en la actualidad le está sucediendo a Unión San Felipe.
En el inicio de la fecha 27ª, dio la sensación que el conjunto albirrojo había dado un paso clave en sus aspiraciones por zafar del descenso cuando venció por 1 a 0 a Santiago Morning. Esa victoria muchos la tomaron como decisiva, porque sacarle 3 puntos de ventaja a un Curicó golpeado y disminuido, que además tenía que enfrentar como visitante a San Luis, no podía ser observada de otra manera.
Penosamente, en la ‘final’ disputada el sábado último en Quillota, el cuadro canario falló en el peor momento de todos al caer 2 a 0 frente a los curicanos que literalmente volvieron a la vida al meter una vez más al Uní Uní al último lugar de la tabla. Ambos tienen 21 puntos, pero los maulinos tienen una diferencia de goles (-11 contra -21), aunque ahora la lucha por no caer a la Segunda División suma un nuevo actor, porque San Luis con sus 26 unidades quedó muy comprometido.