Alcaide de Putaendo mata a mujer gendarme para luego suicidarse de balazo en su sien

Tres fueron los impactos de bala en su abdomen, que acabaron con la vida de la Mayor de Gendarmería Marisol Antonieta Estay Olivares (36) infringidos por su ex-pareja, el Suboficial de la misma institución Luis Benedicto Ardiles Constanzo (38), quien posteriormente se suicidó disparándose en la sien, al interior del domicilio de la mujer, ubicado en Calle Toro Mazote en San Felipe, donde desafortunadamente se encontraban los tres hijos menores de Marisol, quienes presenciaron el macabro crimen.

Las primeras hipótesis del móvil de los hechos, apuntan a la ruptura sentimental que ambos mantuvieron por algunos años, cuando la Oficial -Alcaide de la cárcel de San Miguel en Santiago- decidió romper la relación hace ya un par de meses, situación que no habría soportado Ardiles -recientemente nombrado Alcaide de la cárcel de Putaendo-, quien se dirigió hasta la vivienda de su ex-pareja para cometer el homicidio y posterior suicidio.

LO FATAL

El fatal sábado 1º de diciembre, mientras todo Chile tenía puestos sus ojos hacia la Teletón, a eso del mediodía, Ardiles condujo su vehículo hasta la casa de Marisol ingresando de esta forma para sostener una discusión. Trascendidos indican que el hermano de la víctima, residente a metros de la vivienda, advirtió la presencia de su ex pareja y desde el exterior la telefoneó para preguntarle qué sucedía, donde ella le habría manifestado que todo se encontraba bien.

A los pocos minutos, Ardiles le pidió a los tres hijos menores de edad de Marisol que se dirigieran hasta el patio del inmueble porque necesitaba conversar a solas con su madre, luego de un breve lapso, los niños declaran haber escuchar los balazos, encontrándose con la sangrienta escena y ver que su madre caminó hasta el acceso principal, donde uno de sus hijos gritaba pidiendo auxilio a los vecinos, dirigiéndose hasta la casa de su tío para contarle la tragedia.

Según el relato de algunos testigos residentes del lugar, al escuchar los disparos y desesperados gritos de los niños, requirieron en forma inmediata la presencia de Carabineros junto al Samu, quienes en minutos se trasladaron hasta la vivienda comprobando que la pareja, hasta ese minuto, aún se encontraban con signos de vida, constatándose que Marisol consiente hasta ese momento, fue herida de tres impactos de bala en su abdomen, mientras que Ardiles se auto infirió una certera bala en la sien, donde fueron trasladados de urgencia hasta el Hospital San Camilo de San Felipe.

Hasta el lugar concurrió el Fiscal de Turno Eduardo Fajardo, quien recibió el informe de Carabineros, que adoptaron las primeras diligencias para disponer posteriormente de las pericias de la Brigada de Homicidios de Los Andes en conjunto con el Laboratorio de Criminalística para levantar evidencias. Asimismo, se trasladó hasta la casa de los padres de Marisol para indagar la situación de los niños.

CRÓNICA DE MUERTE

Sin embargo a eso de las 14:20 horas, se confirmó la muerte de Ardiles Constanzo, quien utilizó un armamento de fuego de 9 milímetros para realizar su cometido, la que fue encontrada en el lugar del hecho: “Se constató la muerte de Ardiles Constanzo en el Hospital San Camilo, ambos cuando llega personal de Carabineros y el Samu los trasladan aparentemente con vida, los menores están bien en la casa de la abuela, ellos habrían escuchado los disparos porque estaban dentro del domicilio y es el mayor el que sale a pedir ayuda a los vecinos. El Laboratorio de Criminalística está periciando el sitio del suceso; se van a levantar evidencias del lugar; se encontró un armamento que aún no sabemos si es fiscal o personal, es un arma Taurus 9 milímetros. Ella recibió tres impacto de bala y él recibe uno aparentemente», precisó el Fiscal Fajardo.

HISTORIA DETRÁS DEL DOLOR

Posteriormente cerca de las 16:00 horas y tras ser intervenida, Marisol Estay falleció al interior del San Camilo, pese a que se pretendía trasladarla en Helicóptero hasta el Hospital Dipreca de la Región Metropolitana.

Los consternados vecinos y cercanos a la familia, estaban en shock por la trágica noticia, donde rescatamos algunos testimonios que daban cuenta de la historia de Marisol Estay, emigrante del puerto de Valparaíso, luego de su ruptura matrimonial con el padre de sus tres hijos -actualmente estudiantes del Instituto Abdón Cifuentes- instalándose cerca de dos años en la comuna de San Felipe, manteniendo una relación informal con el Suboficial Alcaide Ardeles, quien esporádicamente visitaba la vivienda de Estay y mantenía una buena relación con los hijos de ésta. Con el correr del tiempo, los continuos viajes que Marisol realizaba a su lugar de trabajo en San Miguel como Alcaide, motivaron a la oficial a querer mudarse a la capital a corto plazo.

Milton Ratje, un amigo muy cercano a Marisol y su familia, conmovido por la situación, señaló entre lágrimas a Diario El Trabajo conocer la vida de su gran amiga, calificándola como una gran mujer, esforzada por sus hijos y que aún no se explica qué fue lo que realmente sucedió, sabiendo que su relación con Ardeles había concluido hace unos cuatro meses atrás.

“Es chocante para nosotros, como amigos que somos parte de la familia, estoy muy choqueado, yo a la Marisol la conozco de años, a sus padres y hermanos, es una amistad de años, nos está golpeando a todos muy fuerte», muy emocionado nos comenta.

No obstante hasta el lugar de los hechos, se hizo presente el Subprefecto de Investigaciones de la Brigada Criminalística (Bicrim) de Quilpué, Gustavo Inostroza Ramos, ex-marido de Marisol Estay y padre de los menores, quien ingresó hasta la vivienda para comprobar lo acontecido con su ex-cónyuge.

Al mismo tiempo en el Hospital San Camilo se hicieron presente el Director (S) Regional de Gendarmería, Teniente Coronel Sergio Alarcón Aravena; la Directora Regional del Sernam, María de Los Ángeles de la Paz, y la Gobernadora Provincial Patricia Boffa, quienes lamentaron los hechos en donde una mujer fue víctima de este violento ataque que se suma ya a los cinco casos en el Valle de Aconcagua, otorgando todo el apoyo necesario a sus familiares para enfrentar este gran dolor.

En horas de la tarde de ayer domingo, los restos de Marisol Estay fueron velados en la Catedral de San Felipe, mientras que a Luis Ardiles se le realizó un pequeño responso en la Capilla Espíritu Santo, para posteriormente ser trasladado hasta la Octava Región para sus funerales.

Pablo Salinas Saldías.

psalinas@eltrabajo.cl