Escalofriante relato de víctima abusada por anciano que lo drogaba

Ana María Donatti, tía de los menores abusados sexualmente, espera confiada que al término del juicio oral el imputado sea condenado a una pena privativa de libertad.

En horas de la mañana ayer martes se llevó a cabo el segundo día de juicio oral que pretende esclarecer la participación de un sujeto de 73 años (no 82 como informáramos erradamente en nuestra edición de ayer) quien drogaba con gas licuado, bencina y aerosoles a dos hermanos de 10 y 13 años para abusar sexualmente de ellos, al parecer a cambio de dinero y cigarrillos, al interior de su vivienda en el sector de Rinconada de Silva el año 2010.

Hasta el momento se mantiene en investigación la muerte de uno de los menores, quien falleció producto de la intoxicación con gas licuado al interior de la vivienda de Manuel Oliva Aguilar, el imputado de abusar sexualmente del menor que perdió la vida de la misma manera que lo hacía con su hermano que sobrevivió a la inhalación de los productos que aspiraba además junto a un hijo del acusado de la misma edad, situación que ocurría bajo un árbol ubicado en el patio del inmueble para no ser descubiertos.

En tanto la Fiscalía y la parte querellante presentaron las pericias realizadas por una psicóloga del Cavas bajo la modalidad de video conferencia desde la ciudad de Valparaíso, dando cuenta que los relatos del menor son creíbles y se mantienen en el tiempo.

 DECLARACIÓN DEL MENOR ABUSADO

A esto se le sumó la esperada declaración de la víctima de actuales 13 años, quien declaró por medio de circuito cerrado de televisión ocultándose su identidad, detallando ante los jueces e intervinientes los abusos a los cuales fue sometido junto a su hermano por parte de Oliva, cuando les proveía del gas licuado en el patio para inhalarlo, donde el menor señala que mientras realizaba esta acción, el sujeto le realizaba tocaciones de forma manual y bucal en sus partes íntimas cuando se encontraba a solas con él al salir de su colegio en distintas ocasiones.

La víctima que en aquel entonces tenía 10 años, acusa que junto a su hermano y el hijo del imputado frecuentaban la vivienda de Oliva para fumar cigarros e inhalar el gas licuado. El hombre les proporcionó bencina y aerosoles para continuar la adicción, haciendo hincapié que en una ocasión su hermano fue objeto de los mismos abusos sexuales cuando se encontraban bajos los efectos de los nocivos tóxicos inhalados.

‘Felipe’ -como pidió la víctima ser identificado en este juicio- detalló todos los hechos que culminaron hasta el día en que su hermano falleció, delatando al imputado que aquel día lo traía en brazos, sin reacción, donde él mismo (‘Felipe’) le proporcionó respiración boca a boca, instantes en que el acusado les señaló que manifestaran a sus padres que se había caído al suelo y se golpeó en la cabeza para no ser delatada la inhalación del gas licuado.

Durante su relato se produjo un quiebre en su voz cuando el Fiscal le consultó su relación con su hermano, respondiendo que lo extrañaba demasiado porque ahora no tenía con quien jugar y sentía mucha vergüenza, rabia y pena por no contar a tiempo lo sucedido, instantes en que sus familiares en la sala se emocionaron de tal manera de llegar a las lágrimas.

LLAMADO DE ATENCIÓN

No obstante al ser interrogado por el Defensor Particular del imputado, Abogado Julio Álvarez, la Magistrado Presidenta del Tribunal Oral le llamó la atención por comportarse de manera agresiva con la víctima durante la ronda de preguntas, donde el menor además le recordó categóricamente que él era un niño de 13 años.

El ejercicio pretendía dilucidar algunas dudas respecto a las declaraciones que reportó el menor ante la Policía de Investigaciones y la Fiscalía de San Felipe, donde se evidenciaban algunas contradicciones en su actual relato con lo declarado hace unos meses.

En tanto la familia de la víctima espera que al término del juicio oral se haga justicia por los dos niños abusados que lamentablemente uno de ellos perdió la vida producto de estos actos, y que extraoficialmente se presentarán las acusaciones posteriormente hacia el imputado que le cabría participación en estos hechos que actualmente están siendo debatidos en el Tribunal Oral en Lo Penal de San Felipe.

QUE VAYA A LA CÁRCEL

Diario El Trabajo se entrevistó con una de las tías de los menores abusados, Ana María Donatti, quien clama que los jueces otorguen una condena privativa de libertad hacia el acusado por ser un peligro para el resto de la sociedad: “Solamente pido justicia para mis dos sobrinos que fueron abusados por este hombre, lo único que pido es justicia, nada más que justicia y que este hombre quede en la cárcel, y que no se vuelvan a repetir nunca más estos casos en el Valle de Aconcagua, mi sobrino se sentía culpable por no haber hablado todo esto antes, fue una pena muy grande para mi hermana que arrastró a toda la familia y nosotros la apoyamos en todo para que no hubieran más niños abusados. Con todo lo que se ha dicho en este juicio nos hizo llorar a todos porque hubieron cosas que este hombre les hizo a los niños. Mi sobrino ahora al recordarle a su hermano, lo único que hace es llorar porque lo echa mucho de menos, porque más que hermanos eran amigos porque iban a todas partes juntos, al colegio, todo, entonces se siente muy culpable por no haber hablado antes”, emocionada nos relata Ana María.

Según se pudo conocer en el juicio, los menores frecuentaban la casa del imputado tras largos 8 años, por lo que su familia argumenta que nunca se imaginaron los abusos que cometía Manuel Oliva, dado que según el relato del menor, les mentían respecto a los olores emanados por los productos inhalados que les generó la adicción y eventual incentivo económico sin saber como niños las fatales consecuencias: “Yo pienso que lo hicieron de ‘monos’, de sentir una sensación distinta como niños, pero este hombre se aprovechaba de eso de que empezaban a inhalar gas, bencina y aerosoles y se escuchó acá en el juicio que él mismo les proveía de eso (…) que este caso sirva para el Valle de Aconcagua, que no quede impune”, sentenció Ana María Donatti.

Para el día de hoy se espera contar con los relatos de la madre de los menores afectados, peritos y personal policial que adoptaron el procedimiento el 10 de febrero del año 2010 cuando se hizo público este caso.

Pablo Salinas Saldías

psalinas@eltrabajo.cl