Niño accidentado en rotonda Almendral sigue hospitalizado en Valparaíso

Reclamando en nuestra Sala de Redacción porque a su parecer nadie del Liceo Mixto le ayuda con el problema de su hijo hospitalizado, el que llevara la peor parte luego que unas catorce personas resultaran lesionadas de distinta consideración la mañana del miércoles 1º de agosto de 2012 en un choque entre dos vehículos ocurrido en la rotonda El Almendral, circunstancias en las que Martín Espejo, de diez años, resultara gravemente herido hasta la actualidad, a casi ocho meses del percance, pareciera que el futuro del pequeño no mejorara, pese al esfuerzo del padre del niño.

Según lo reportó Manuel Espejo, padre del menor a Diario El Trabajo, su hijo Martín resultó con un traumatismo encéfalo craneano, con fractura de cráneo de carácter grave, por lo que luego de ser estabilizado en el Hospital San Camilo, fue trasladado por tierra hasta la Clínica Reñaca con escolta policial, desde entonces ha sido una lucha por recuperar un nivel normal de vida que tiene a este padre sanfelipeño al borde de la desesperación.

UN PADRE DESESPERADO

El hecho ocurrió ese día pasadas las 15:00 horas en plena rotonda, coincidiendo con la salida de los alumnos de distintos cursos del Liceo Mixto de San Felipe, cuando uno de los vehículos que se trasladaba por la rotonda fuera impactado por un móvil repartidor de gas que se trasladaba desde El Almendral en dirección a Avenida Miraflores, y al enfrentar la rotonda, al parecer no habría respetado el disco Ceda El Paso.

– ¿Cuál es el estado de su hijo Martín?

– «Yo trabajo en construcción, el problema que tengo es que a mi hijo de once años lo tengo internado en el Hospital Carlos Van Buren, a raíz de una aneurisma cerebral que lo tiene muy mal, mi hijo no puede ver bien; no camina bien; pierde el equilibrio; le duele mucho la cabeza; tiene un trauma facial que le obliga a tener que usar lágrimas artificiales en uno de sus ojos y ya no se ha podido integrar a su rol de estudiante».

– ¿Tan grave lo ha pasado en estos meses?

– «Lo que pasa es que a raíz de todos estos males, mi hijo entró en estados depresivos muy serios y lloraba mucho, los médicos le dieron unas pastillas para que a él le subiera el ánimo, pero fue terrible, pues mi pequeño se tomó todas las pastillas al tiro, no murió porque el medicamento no era tan potente, pero sí estuvo muy mal».

– ¿Son muchas las deudas que ha contraído?

– «En deudas ya estoy debiendo casi los 800.000 pesos y hasta perdí mi trabajo, pues en la empresa en la que laboraba no me permitieron seguir pidiendo permisos para poder atender a mi hijo Martín».

– ¿Se han portado bien con usted en el Liceo Mixto?

– «Conmigo en El Mixto no tienen que ‘portarse bien’, es con mi hijo con quien deberían, pues el alumno es Martín, no yo, mi hijo sólo recibió una ayuda de 60.000 pesos cuando ocurrió el accidente, pero ahora luego, cuando he pedido ayuda, sólo me dicen que ‘me van a llamar’, que pronto me ayudarán, pero nada pasa, yo pienso que me están tramitando (…) también se me dijo que habían dispuesto de un abogado para atender mi caso, pero hasta el momento él ni me ha llamado».

 «NO COMPARTO EN ABSOLUTO»

Sobre los reclamos hechos por Espejo en contra del accionar del Liceo Mixto, Diario El Trabajo habló con Miguel Herrera, Abogado del centro educativo, quien no compartió las declaraciones del apoderado.

«Tenemos que establecer que esto fue un accidente de tránsito, mismo que ocurre fuera de nuestro establecimiento y que ocurre en un lugar que no era para estar ahí (…) hay que tomar en cuenta que no existe ninguna obligación legal en este caso, pues es un accidente de tránsito en el que un imprudente conductor provocó un accidente muy impresionante, situación que no refleja intencionalidad, sino que es lo que es, un accidente», comentó Herrera.

Según el abogado, el liceo actuó por una cuestión moral, y no porque tuvieran la obligación legal de intervenir.

«El día del accidente y por una responsabilidad de carácter moral, no legal, el establecimiento estuvimos al tanto de todo lo que pasó, a los días se me pidió que facilitara asesoría a los apoderados que la aceptaran (…) en cuanto al señor Manuel Espejo, yo me he entrevistado con él como unas diez veces, a este señor se le ha guiado para que se logre activar el Seguro de Accidentes Obligatorio, mismo que también está en proceso, a él se le ha explicado todos los pormenores de este proceso», agregó Miguel Herrera.

La reacción de este funcionario fue categórica al calificar los reclamos de Espejo como improcedentes.

«No comparto en absoluto lo declarado por el señor Espejo, que señala que en nuestro establecimiento no nos hemos preocupado por el bienestar de su hijo; no comparto en absoluto que este señor tenga que exigir y pedir cosas, pues nosotros hemos apoyado lo más que podemos, él nunca ha venido a decirnos que necesita dinero para los pasajes», puntualizó Herrera.

Roberto González Short

rgonzalez@eltrabajo.cl