- Animales eran brutalmente transportados en cajas de alimentos y jugos.–
Un brutal y desgarrador caso de maltrato animal quedó al descubierto en el paso fronterizo Los Libertadores, cuando fiscalizadores del Servicio Nacional de Aduanas detectaron el intento de ingreso irregular de aves de contrabando. Animales que eran transportados en condiciones deplorables.
La situación fue revelada cuando fiscalizadores de la Aduana de Los Andes seleccionaron un vehículo particular en el que viajaban dos ciudadanos chilenos; todo esto, con la finalidad de aplicar y desarrollar los respectivos planes de fiscalización que se realizan en el complejo fronterizo.
Al momento de la inspección, uno de los funcionarios se percató que en la guantera del vehículo, habían dos envases vacíos de alimento para ave, por lo que preguntó a los ocupantes del vehículo por esta situación; estos, guardaron silencio y no respondieron ninguna de las consultas.
De esta forma, se realizó un chequeo exhaustivo que comenzó con preguntas a los pasajeros, respecto a si portaban mercancías que declarar, recibiendo una respuesta negativa.
Es en ese momento, que los fiscalizadores revisaron la vestimenta de uno de los viajeros, en las que encontraron 25 envases de jugos dentro de los cuales estaban ocultas diversas aves. Luego, al ser inspeccionado el acompañante, la inspección arrojó el mismo resultado.
En este contexto, es que los funcionarios pudieron constatar que 17 de las 50 aves perecieron debido a las condiciones del viaje, asfixia y deshidratación, considerando las condiciones en las que estos animales eran transportados por estas dos ‘personas’.
En este sentido, el director regional (s) de la Aduana de Los Andes, Henry Domingo Jorquera, señaló que «estos operativos forman parte de nuestras labores, estrategias y políticas de control transfronterizo. En este procedimiento, funcionarios pudieron detectar el ingreso de 50 aves que no habían sido declaradas, viajando en las peores condiciones, en un evidente caso de maltrato y sin contar con la documentación correspondiente», precisó.
De esta forma, Domingo detalló que este caso «representa un claro peligro para nuestra fauna, ya que no sabemos si estos animales pueden portar algún tipo de enfermedad, por lo que se realizó un trabajo conjunto con el organismo a cargo; en este caso, el Servicio Agrícola y Ganadero (SAG)».
Junto con esto, y siguiendo con el procedimiento, el SAG determinó que las aves incautadas no eran parte del listado de la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres (CITES), pero sí se constituía la figura de maltrato animal según regula la Ley 21.020, sobre Tenencia Responsable de Mascotas y Animales de Compañía.
Una vez denunciados los hechos al Ministerio Público, el fiscal a cargo del caso, decretó que la investigación estuviera a cargo de la Policía de Investigaciones (PDI). Los dos ocupantes del vehículo pasaron a control de detención.
