En el Juzgado de Garantía de San Felipe fue presentada una querella criminal por lesiones graves contra todos los que resulten responsables por parte de Ximena del Carmen Fuenzalida Herrera, domiciliada en la comuna de Santa María.

En el documento se indica que el 11 de abril de este año 2025, siendo las 18:20 horas aproximadamente, en momentos que se dirigía a su domicilio ubicado en la Población Roberto Huerta en Santa María, tomó un microbús de locomoción colectiva de la empresa ‘Vista Valle’, anteriormente ‘Vera Arcos’, placa patente única DWVZ-88, en calle Freire con Traslaviña de San Felipe. Este desplazamiento es el que Fuenzalida realiza a diario, pues su fuente laboral es el Colegio Santa Juana de Arco, ubicado en alle Ramón Freire Nº 272.

«Al pasar unos 10 minutos siento algo raro en mi pierna, como que me picaba, me ardía. Ya pasando los minutos pasado el hospital, me levanto y le digo al conductor ‘oiga, sabe que algo hay algo en ese asiento que me duele la pierna’; ‘no, me dijo, no hay nada, cámbiese de asiento’. Me cambié, me fui más atrás, me senté y eso, como ese líquido, ya estaba impregnado en mi pantalón, la pierna me seguía ardiendo… me seguía ardiendo, yo decía ‘Dios mío, qué será’.

«En un momento estuve con la idea de sacarme hasta el pantalón, pero usted entederá uno como mujer es pudorosa. No lo hice, me las aguanté hasta que llegué a mi casa. Ahí le dije a mí mamá ‘por favor, tráigame un espejo que algo me pasa’; claro, levanto la pierna y tenía unas manchas negras. Llamo a mi hermana Magy, le digo ‘esto me pasa’; me responde que viene. Cuando llega, ve y me dice que ‘tenemos que ir a Urgencias porque esto es grave, porque son quemaduras’. Fuimos a Urgencias, claro, y efectivamente eran quemaduras con un liquido desconocido», detalló.

Sigue comentando que del Hospital San Camilo se fue a la Asociación Chilena de Seguridad (ACHS), «porque por el trabajo era accidente de trayecto, eso me llevó a estar 35 días con licencia, en curaciones aquí en San Felipe y en la ACHS en Santiago, porque en realidad a ellos les llamaba la atención el muy poco tiempo, si eso es una necrosis. Afortunadamente, no fue algo tan invasivo, fue más superficial, pero igual no deja de ser. Esto fue entre el glúteo y entrepiernas,   imagínese como mujer expuesta a que todos la vean.

Cuento corto, mi esposo con mi cuñado fueron a la empresa Vera Arcos, porque de ellos es la máquina, donde explicaron la situación, pedir las cámaras para saber lo que realmente había pasado, pero ellos se negaron rotundamente. Al final, es como que a mí me pasó algo y yo soy la responsable. Me da lata, porque soy una usuaria que viaja todos los días a San Felipe, ocupo la movilización de la micro; una, porque es más barato, me deja cerca de mi trabajo y resulta que ellos cero empatía conmigo, por último para saber cómo estoy, porque plata en esos momentos no necesitaba. Al final, todo corrió por accidente de trayecto, pero al final uno como persona cómo queda, poco condesciéndete con el resto, nosotros que siempre usamos la micro… cero empatía conmigo.

– ¿Ninguna cooperación?

– Ninguna, ninguna, ninguna, ninguna.

– ¿Ustedes hablaron específicamente con alguien?

– Sí, mi esposo y mi cuñado hablaron con alguien, específicamente.

¿Era el gerente, el dueño? – Acá responde el esposo Danilo Arancibia Brante

– En principio hablamos con Alexis Pavez, quien nos dijo que no había una persona que mostrara las cámaras, siempre fue todo negativo y después, la última vez, nosotros hicimos un escrito, fuimos con un papel solicitando la entrega de cámaras. Yo me entrevisté, no sé si será el dueño, un señor que me mostró el sillón donde mi señora tuvo el percance y la verdad ya estaba cambiado también. Lo intervinieron, lo lavaron, porque tengo unas fotos, registros de como quedó y después como lo mostraron ellos; o sea, claramente ya estaba alterado. Tampoco ese día nos mostraron las cámaras, nos dijeron que fuéramos al otro día… tampoco. Después al tercer día llamaron por teléfono, pero habían pasado seis, siete días de los hechos, ya no se justificaba.

– Ustedes toman la determinación de hacer una denuncia, presentar una querella, ¿qué pasa con eso?

– Claro, una querella contra quienes sean responsables de mi situación. Inclusive fui al Sernac un día que fui a Santiago, porque a todo esto me derivaron hasta cirujano, tuve que ir varias veces y en una de esas justo pasamos por la oficina y puse el reclamo. Ellos en esa oportunidad dicen que no son responsables de lo que me pasó, eso les respondieron al Sernac, entonces ¿quién es responsable, de quién es la micro?

– Tiene que haber una preocupación de mantención

– Exactamente, claramente el asiento estaba partido, como rajado en mal estado, entonces cualquiera puede haber puesto; alguien o ellos cuando hacen la limpieza en sus buses, porque creo que deben aplicar algún producto. Claro, cayó ahí y lamentablemente tuve la mala suerte de sentarme yo. Me senté, subió el líquido y me quemó la piel.

– Ese es el resumen

– Exacto.

– Lo otro, ¿por qué hacerlo público?

– Porque en realidad creo es como necesario que la gente sepa lo que a uno le está pasando, porque al final nosotros estamos pagando por un servicio… un servicio que no está bien hecho, porque ellos como empresa responsable tienen que preocuparse de la mantención de sus vehículos, ver que estén los asientos en buenas condiciones para que no vuelva a pasar lo mismo. Ahora me pasó a mí, le pudo haber pasado a un niño, a un adulto mayor. A mí me dijo el doctor ‘imagínese que esto le hubiera llegado a sus partes más intimas’; ¿cómo estaría yo? Sí fue una incomodidad muy grande para que te hicieran los aseos, para ir al baño, para bañarme fue horrible… horrible. Más encima tú vas a ir a que todo el mundo te vea, ellos están acostumbrados pero una como mujer es pudorosa, no le gusta andar mostrándose a cada rato, día por medio tenía que ir a curaciones, soportar el dolor, porque era insoportable. Por eso quiero que la gente sepa lo que pasa aquí en la comuna con este servicio, que es malo en realidad… es muy malo.

– ¿Cómo está usted hoy día?

– Yo, gracias a Dios estoy bien, igual me quedó una cicatriz, tengo delicado, porque es una zona de la piel muy sensible. Pero estoy bien, ya estoy trabajando, pero gracias a Dios ya me recuperé bien.

Diario El Trabajo intentó comunicarse con la empresa Vista Valle para tener algún comentario sobre esta situación, pero hasta el cierre de esta edición no obtuvimos respuesta.

Frases como ‘son seis por $1.000 los Disfruta’, ‘son historias padre’, son las que muchas veces y en distintos lugares como San Felipe, Llay Llay, La Calera e incluso en ocasiones en Valparaíso, escuchan día a día las personas. Esas inconfundibles frases provienen de Anderson Eduardo Collao Padilla, conocido popularmente como ‘El Andy’, hincha acérrimo de Universidad de Chile y de su querido Unión Delicias.

Marcado por la estigmatización, el esfuerzo y el trabajo, ‘El Andy’ –a quien se le ve frecuentemente vendiendo los reconocidos efervescentes ‘Sal de Fruta Disfuta’-  tiene una historia que merece la pena ser contada.

­- ¿Andy cual es tú historia? Porque te vemos todos los días vendiendo Disfruta, trabajando en agrícolas, por ahí

– Mira, yo soy nacido y criado en la (Villa) 250 (Años), antes había un campamento… yo viví hasta los 2 años. Mi familia siempre han sido comerciantes, mi mamá lleva más de 30 años con un puesto en la plaza y yo seguí el hilito, pero yo fui papá muy joven, a los 20 años ya tenía tres hijos, entonces resultó difícil al principio, pero siempre con trabajo establecido y durante el fin de semana le metía cosas de comercio. Estoy separado hace cinco años de la mamá de mis hijos, tengo buena relación con ella gracias a Dios. Me siento afortunado, tengo tres hijos maravillosos, las dos niñas viven conmigo; la mayor de 20 y (otra hija de) 18, el Agustín que tiene 14 años vive con la mamá, en la casa del pololo, pero bien gracias a Dios… luchadores, esforzados.

HOY POR HOY ‘LA COSA NO ESTÁ BUENA’

«No he tenido trabajo (estable últimamente), la idea siempre sería trabajar de lunes a viernes y descansar los fines de semana, pero no he tenido donde yo gane un sueldo para que pueda. Si es por eso que la gente me ve vendiendo los sábados y domingos, no tengo un trabajo bueno que me dé por sobre lo que gasto. Yo pago arriendo, mesada, ayudo a las niñas que están en la universidad, así es que eso», señaló

– ¿Tus dos hijas están en la universidad?

– Sí, la mayor está aquí en la (Universidad de) Playa Ancha, estudiante de Ingeniería en Informática, es la que vive conmigo. Y la chica (18) entró este año a estudiar Educación en Párvulos a la Universidad Católica de Valparaíso.

– ¿Cómo te sientes con eso?

– Es un logro tan importante, un orgullo… siempre quise verme con vida y ver a mis dos hijas en la universidad. Una viaja los lunes y la mayor que vive conmigo, la veo en las mañanas y cuando llega… estoy pagao’ (sic) con eso. La idea es tener días para ver a mi hijo el chiquitito, pero hay que ser profesional en la vida, si esa es como la espinita que siempre voy a llevar, donde no lo pude (hacer) yo. Porque fui papá de mis tres hijos, traté de formar una familia y no se me dieron los estudios, pero es bonito ser profesional, si ese es el máximo orgullo. Yo les digo a las niñas que en su carnet se vea reflejado atrás profesión u oficio, así es que en esa andamos.

ORGULLOSO DE SU VILLA 250 AÑOS

– Eres de la Villa 250 años, ¿te has sentido estigmatizado, cómo ha sido esa parte?

– Mira, he vivido las dos caras de la moneda: cuando estudiaba en el (Colegio) Alonso de Ercilla sufrí discriminación por profesores, compañeros de curso, por ser de la (Villa) 250 (Años). Saliendo del colegio nooo (sic), a mí se me han abierto hartas puertas al final al ser de la ‘250’…muchas puertas. Pero como se dice que hay gente mala, pero (también) hay gente buena como yo, que nunca me ha faltado el trabajo, siempre he sido respetuoso y orgulloso de mi población. Hay cosas malas como en todos lados, pero desde que salí del colegio he sido más beneficiado por ser de la ‘250’, con opciones de trabajo, gente que me considera, así es que yo soy orgulloso de ser de la ‘250’.

– ¿Cómo surge la idea de salir a vender Sal Disfruta a la calle? porque es donde te vemos más a diario

– A mí siempre me gustó vender espárragos desde chico, cuando mi mamita me los traía. El ‘Disfruta’ me nació porque un día fui a Santiago y vi a un ‘viejito’ (sic) que lo vendía con vitamina C y se subía a las micros. Me entró la curiosidad, le pregunté y me dio el dato; ahí empecé a venderlos. Es mercadería fácil de transportar; o sea, yo trabajo de 1 a 2 (PM) en horario de almuerzo, ese (horario) lo ocupo, salgo a recorrer los restoranes. Los sábados y domingos ando en las ferias del Valle del Aconcagua. La plata que entra es para disfrutar la vida, darme los gustos, ir a la playa, a la cancha… gracias a Dios no tengo deuda, no le debo nada a nadie. Pero hay que meterle comercio ambulante, porque con lo que gana, como te digo no alcanza.

Collao dice que es muy feliz con lo que hace. «Dios me dio la oportunidad de ver a mis dos hijas en la Universidad y no me canso, es el motivo que uno tiene con el Agustín. Yo vivo solo, a mis 40 años he parado dos casas, me siento afortunado de la vida, siempre doy las gracias porque me siento un afortunado.

– ¿Tú familia quiénes  la componen?

– Mis ‘viejos’ (padres) están separados en la actualidad, mi mamá tiene un puesto ahí en Traslaviña con Prat; vende frutos secos, frutillas, espárragos… se da vueltas con mi hermana Jocelyn. Y mi viejo, el máximo orgullo para mí, trabajador, luchador igual que yo (‘El Cherry’), siempre me he reflejado en él. Mi viejo trabaja para el sur, norte, para todos lados, pero en los momentos libres le mete comercio. Y mi hermano, que es el profesional de la familia estudió Gastronomía Internacional, tiene su quiosco, tiene proyectos que le resultan, mercadería ad hoc al tiempo. Por ejemplo, ‘La Chaya’, anda en las ferias para los ‘18’ (de septiembre), tiene su fondita, así es que somos todos comerciantes.

– Para cerrar y finalizar, una reflexión final o algo que quisieras decir

– Que hay que ser buenos papás y viceversa. Yo cuando vivía con la mamá de mis hijos no fui mal papá, pero descuidé mucho a los niños a donde trabajé tanto. Mi diversión era en forma personal, los domingos a la cancha, ir donde ‘Don Chalo’ (Q.E.P.D.), porque donde trabajaba, yo daba mucho por la familia y descuidé esos momentos. Pero hay que ser buenos papás y viceversa, separados, estando distanciados, los niños no pueden ser dejados de lado. Eso me gustaría, que todos sean buenos papás, las mujeres y el hombre, porque cuando se separan muchas veces cortan la relación con sus propios hijos. Tengo hartos amigos que pasan por eso; yo al contrario, más me uní a la mamá de mis hijos, la respeto, la quiero harto, me llevo muy bien con ella y me uní más a mis hijos. Momentos que antes yo nos los disfrutaba, ahora para mí son sagrados… esa es mi reflexión.

• Suma importante logros, siendo uno de los pocos deportistas nacionales en destacar en tres disciplinas distintas.-

El destacado patinador artístico sanfelipeño Claudio Barraza, de 19 años de edad, ha sido seleccionado para representar a Chile en el próximo Torneo Sudamericano de Patinaje Artístico que se realizará en Porto Alegre, Brasil, entre el 4 y el 10 de agosto de este año. El deportista clasificó tras obtener el tercer lugar en la categoría Sénior Internacional, en el selectivo nacional realizado el pasado 22 de mayo en el Estadio Nacional, en la modalidad Solo Dance.

«Estamos trabajando fuerte para llegar lo mejor preparados posibles, ya que convoca a todo Sudamérica, los mejores exponentes en el patinaje artístico. Muy contenta por el desempeño de Claudio, su pasión, su compromiso con el deporte que lo ha llevado a ser seleccionado nacional y representar a Chile en Brasil», expresó Camila Soto, actual seleccionada nacional y entrenadora de Claudio en esta disciplina.

Barraza entrena en Santiago bajo la supervisión de Soto desde febrero de este año, y pese al corto tiempo, ha mostrado avances sorprendentes. Valeska Lagos, su entrenadora desde 2017 en el Club Estrellas sobre Ruedas, destaca que «fue un largo recorrido que estuvimos Claudio y yo buscando entrenadora. Llegamos donde Camila en el mes de febrero. Claudio solamente ha estado pocos meses entrenando danza con Cami y ya está obteniendo logros súper destacados en poco tiempo».

El joven patinador actualmente estudia Pedagogía en Educación Física en una universidad de Santiago, y además entrega clases de patinaje artístico a niños y jóvenes en los clubes Amengual de Pudahuel y Kyomu Skating Club de Ñuñoa. «En el último periodo ha sido llamado de otros clubes para impartir clases, pero queremos ir paso a paso. Primero su carrera deportiva y sus estudios», señala Lagos.

No es la primera vez que Claudio Barraza destaca a nivel internacional. En abril de este año obtuvo el cuarto lugar en la Copa AIS Brasil en la modalidad Freeskating Sénior, y en junio representó a Chile junto a su compañera Rocío Galdames, en la categoría pairs sénior en los Juegos Panamericanos de Ibagué, Colombia, donde también lograron el cuarto lugar. A esto, se suma su título de campeón nacional en freeskating sénior internacional, otorgado por la Federación de Patinaje Artístico.

«Son muy pocos los deportistas que tienen en tan poco tiempo tantos logros. Claudio no solo ha sido seleccionado nacional en Danza, sino que en Libre y en Parejas de Alto. Así que estamos súper felices y orgullosos de todo lo que ha crecido», concluyó Valeska Lagos.