- Tradicional trabajo ha ido desapareciendo con el paso de los años.-
Orlando Lobos López es técnico agrícola egresado de la Escuela Salesiana en Catemu, pero la vida lo llevó por otro camino laboral y hoy es el único fabricante de artesas de cemento con granito que va quedando en San Felipe, trabajo que lleva ejerciendo por alrededor de 50 años en su taller ubicado en calle Molina Nº 105.
Diario El Trabajo estuvo en el espacio en el que lleva a cabo estos estéticos recipientes de gran durabilidad, los que son utilizados para la construcción. A continuación le dejamos su historia:
– ¿Cómo empezó?
– Bueno, en esto yo empecé con mi papá y él empezó con mi abuelo, quien trabajaba en esto y le enseñó a mi papá… digamos a toda la familia por parte de él. En el fondo, el que quedó trabajando fue mi papá con mi tío Jorge y mi papá empezó a enseñarme de a poco, pero el que me enseñó bien fue mi tío Jorge.
– ¿Ahí parte usted?
– Digamos, yo salí del colegio de los Salesianos de Catemu, hice mi práctica en la Hacienda de Quilpué en vinificación y después estuve trabajando en varias partes y mi papá tuvo un accidente… y de ahí ya me hice más cargo de lo que es la fábrica.
– ¿Desde hace cuánto tiempo estamos hablando?
– Hace unos 45, 50 años atrás.
– O sea, 50 años lleva trabajando en estos más o menos
– Más o menos, y después del accidente nosotros vivíamos en Toromazote, nos pidieron la casa… como no era nuestra, arrendábamos. Nos trasladamos a este sitio que era de mi papá, así es que ahí nos vinimos para acá y de ahí definitivamente con mi papá nos hicimos cargo de esto.
– ¿Cómo ha sido esta experiencia?
– Bonita en el fondo, bonita la historia, porque yo nunca pensé que iba a trabajar en esto… para que voy a decirle, porque mi profesión es técnico agrícola. Yo cuando estaba chico no me gustaba, pero en el fondo iba a cargo de todo esto y empecé a trabajar. Mi papi antes que falleciera hacía (artesas) y después empecé hacer yo cuando falleció, pero yo siempre estaba ayudándole haciendo artesas. Como yo me dedicaba más a la fabricación de vibrados de panderetas, él se entretenía en esto.
– ¿Estas se llaman artesas?
– Artesas, pero algunos le llaman bateas.
– ¿Es muy complicado hacer una?
– No, no es tan complicado, pero sí hay que tener paciencia porque hay que hacer la tierra color, echarle el granito, revolverla y colocar la primera capa que es de color con granitos. Después viene una de mezcla, se deja orear, se le coloca alambre a todo el alrededor para que las afirme y después vuelve a echar la segunda capa. Así es que ahí recién a esperar que esté bien oreado para tacharla, para que quede pareja.
– ¿Se vende todavía la artesa, la ocupan?
– La gente antigua la ocupa, esta me la mandó a hacer un caballero que se le quebró y él dijo ‘no, yo quiero mi artesa’ y llegó el joven acá. Le dije ‘ya sé cuál es la artesa, es la mediana’. Me la mandó a hacer y está lista, y hoy día (miércoles) la viene a retirar en la tarde.
– ¿Podemos dar los precios?
– Claro, van de los 65 mil pesos que es la mediana, el molde chico vale 55 mil pesos, y otra de 85 mil pesos; esa es la más grande de todas. La mediana hace como 60, 70 litros y las mas grande hace como 120 litros.
– Usted nos decía que es el único que va quedando en estos momentos
– En estos momentos soy el único que está quedando haciéndolas, hay unos parientes que saben hacer; el Sergio Salinas de la fábrica de allá debajo, de vibrados… él sabe hacer pero no se dedica ahora, no hace, porque según él no le conviene. No puedo decir que no me convenga, pero me entretengo y además que si una persona necesita una artesa para mí es bonito. Antiguamente se hacían mucho y ahora son muy pocas las personas.
– Una reflexión final de todo lo que ha sido su vida fabricando artesas
– Muy bonita, lo único que le puedo decir. Es bonito este trabajo, delicado y a uno lo saca de todos los malos pensamientos que pueda tener, hace trabajar la mente, todas esas cosas… se mantiene uno activo.
Por si algunos de nuestros lectores se interesa en este tradicional trabajo de construcción, el contacto de Orlando Lobos López es el +56 9 7872 3559.

