Pareja de Curimón está sin hogar tras ser impedida de entrar a su casa

  • Llevan más de 90 días viviendo en la calle, luego que el Juzgado de Garantía decretara la prohibición de acercarse a su propia casa en la que han vivido durante los últimos 13 años. Gracias a la ayuda de vecinos, la pareja hoy puede dormir en la sede vecinal.-

Yenny Cortés junto a su pareja Jorge Arriagada, son dos residentes de Curimón que llevan más de 90 días viviendo en la calle. Acusan que la razón corresponde al hostigamiento que sufren por parte de un grupo de vecinos de Camino del Inca, sector en el que se ubica la casa, situación que les impide acceder al hogar en el que vivieron por 13 años.

En el 2020 inició la seguidilla de conflictos cuando Yenny tuvo complicaciones con una de sus vecinas. Sin embargo, el problema se viene desarrollando desde mucho antes, cuando Cortés llegó a vivir junto a su hijo y tío (dueño de la vivienda en cuestión) al domicilio: «me vinieron los mismos problemas de cuando yo vivía encerrada. (…) Antes me decían cosas. (…) Me ponían mal en la junta de vecinos, con el dueño de la casa, el tío llegaba enojado».

Al costado del inmueble está un área verde que años atrás fue ocupada por uno de los vecinos para trabajar. Relata que fue a la Oficina de Mediación «porque yo no podía dormir, se me caían los automáticos, entonces ellos siempre han querido que yo me fuera de ahí.

«A mí me molestaba que él trabajase junto a mi ventana, no importaba el día ni la hora, él trabajaba nomás. Se llegó a un acuerdo en la junta de vecinos de que se iba a hacer un muro, lo hizo él, me dejó un pedazo de terreno que no me correspondía. (…) No entiendo cómo no hay una ley que lo multe o le haga algo».

Luego de la intervención, el espacio se recuperó, pero comenzó el acoso hacia Cortés: «a lo mejor ahora quieren que esa casa quede para que el dueño la venda, a bienes raíces o para el Estado».

 

DENUNCIAS EN SERIE

Explica que el modus operandi que utilizan para sacarla de la vivienda son las denuncias (tres por amenazas y una por violación de morada), las que terminaron en arrestos, además de órdenes de alejamiento. A raíz de esto, Yenny junto a Jorge se vieron obligados a residir en la calle hasta que terminaran los 90 días de investigación, por la prohibición impuesta en enero por parte de una de las vecinas. No obstante, en esos 90 días, uno de los herederos (Yenny es hija de una heredera) puso un candado en la puerta, por lo que al volver Cortés, fue detenida de nuevo, esta vez acusada de violación de morada por ingresar a su propia casa.

Actualmente, el domicilio aún tiene el candado puesto por uno de los herederos. Las vecinas Carol Silva, Nelly Vega y Sandra Robles declararon que el sujeto no habita la casa y tampoco se le conoce en el sector: «el caballero llegó a una reunión diciendo que él era el dueño y que no quería que Yenny llegara ahí, pero más que nada porque lo llamaban todo el tiempo los vecinos, que de eso estaba aburrido», relata Silva.

«Siempre fue ‘hola vecina’, después tuvimos más contacto porque yo le compraba plantas, pero nunca me faltó el respeto. (…) Nunca han hecho una fiesta, siempre han sido ellos solitos», opina Sandra Robles sobre el comportamiento de Yenny y Jorge.

«Yo por eso quise ayudarla, ella estaba sola y nadie le prestaba ayuda. Encontré que era tan injusto lo que hacían ellos… Dormir en la calle, teniendo su casa, por eso yo comencé a hacer gestiones para que la dejaran acá en la sede, hablé con los vecinos y estuvieron todos de acuerdo en que querían ayudarla», expresa Nelly Vega. Carol Silva añade que, por el momento, Yenny y Jorge continúan habitando dicho lugar «están desde el viernes, durmiendo porque salen en la mañana y no llegan en todo el día hasta la noche para pernoctar».

Jacqueline León

Las vecinas en defensa de Yenny Cortés: Carol Silva, Sandra Robles y Nelly Vega.
Las vecinas en defensa de Yenny Cortés: Carol Silva, Sandra Robles y Nelly Vega.
Área verde que, según hipotetizan las vecinas y la afectada, sería el inicio de los conflictos.
Área verde que, según hipotetizan las vecinas y la afectada, sería el inicio de los conflictos.
Yenny y Jorge tuvieron que vivir en la calle por más de 90 días.
Yenny y Jorge tuvieron que vivir en la calle por más de 90 días.
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