Asegura mujer que tiene uno similar en el jardín de su casa: “Mis amigos me piden que devuelva el león de la Plaza de Armas”

• Por difícil que resulte aceptarlo, todo indica que definitivamente jamás existieron leones en la Plaza de Armas. La Municipalidad al menos no tiene registros de ellos y no hay un solo vecino que pueda exhibir una fotografía de los felinos.

Siempre con miras a encontrar la mejor respuesta y más razonable en materia del mito urbano de los leones de la plaza, Diario El Trabajo decidió visitar la vivienda del ex gobernador de San Felipe, Fernando Horta Jones, a quien la leyenda señala como el beneficiario de tener dichas estatuas en el jardín de su casa, misma ubicada en el sector Lo Campo de Panquehue.

EN LA CASA DE HORTA JONES

El jueves pasado, antes de publicar la primera parte de este reportaje, realizamos una visita al fundo de Horta Jones, donde logramos entrar a la propiedad y entrevistarnos con una de las hijas del ex gobernador, a quien luego de explicarle todo el revuelo popular y rumores sobre la existencia de los leones en los jardines de esa propiedad, nos permitió hacer un recorrido por la vivienda y sus alrededores. En nuestra visita pudimos confirmar que efectivamente no existen leones ni rastros de haber existido estatuas en algunos de los rincones revisados.

Las llamadas telefónicas a Diario El Trabajo siguen siendo numerosas, nuestros lectores dan abundantes e insólitas direcciones de la procedencia de los leones, en una llamada anónima se dio el aviso de que los ‘leones están en la casa ubicada en la esquina de Navarro con Traslaviña’ (dirección imposible de existir).

OFICIALMENTE NO EXISTIERON

Con la finalidad de conocer cuál es la versión oficial sobre este polémico caso, nuestro medio habló con Claudio Díaz, Director de Obras de la Municipalidad de San Felipe desde hace 19 años, quien explicó que “en función de esta polémica, nosotros no hemos encontrado a la fecha algún registro que pueda certificar la existencia real ni gráfica de estos leones, lo que sí tenemos claro, son las posibles ubicaciones de la ubicación de las estatuas, pero ninguna de esas informaciones coinciden ni planiméricamente; ni documentos históricos; ni de los estudios que se han realizado de nuestra provincia, nada de eso confirma que hubo leones en nuestra Plaza de Armas (…) yo he visto varios registros fotográficos de nuestra plaza, pero en ninguno aparecen más elementos de los que ya conocemos de nuestra plaza”, explicó Díaz.

Este funcionario dio una explicación más creíble por los más escépticos en el tema.

“A ver, yo también tengo imágenes en mi memoria, de haber estado montado encima de un león, pero creo que es un fenómeno colectivo y psicológico de asociación de imágenes, pero después haciendo memoria, sí recuerdo que esos leones a los que me subí, eran los de la Plaza Victoria que está en Valparaíso, finalmente puedo decir que la información ‘Oficial’ es que nunca hubo leones en la plaza”, concluyó Claudio Díaz a Diario El Trabajo.

Contrario a lo dicho por este funcionario municipal, Vicente Reinoso, encargado del kiosco en la esquina del Banco de Chile, en Merced con Salinas, y con 72 años de edad, opina todo lo contrario a la versión ahora oficial del municipio.

“Cuando yo fui niño, jugábamos en los leones, estos leones estaban insertos en un pasaje que daba a la antigua Farmacia Cruz Blanca, ahí estaban los leones, eso lo tengo muy claro, no existen fotos de los leones, porque estos leones estaban escondiditos en ese pasaje, por eso no hay fotos, dejé de verlos cuando cerraron la plaza a mediados de los años ochenta”, afirma Reinoso.

 “DEVUELVA LOS LEONES DE LA PLAZA”

Siendo que Diario El Trabajo ha buscado ‘por cielo y tierra’ a estos célebres felinos sin resultados positivos, fue gracias a una llamada anónima que logramos dar con una vivienda ubicada en la población Arturo Prat, lugar en que descansa en el jardín, una imponente estatua de un león de color blanco.

Quisimos conocer la procedencia de dicho adorno.

“Desde niña y estando yo en Prebásica, recuerdo que mi papá trajo ese león blanco, nos sentimos acompañadas por esa enorme mascota, lo que pasa es que desde entonces mis amigos me tiran tallas diciendo: ‘devuelve el león de la plaza’, por supuesto que es para reír, pero igual siento que todos en San Felipe añoramos saber en definitiva qué es lo que pasó con esos leones”, explicó a nuestro medio Claudia Lillo, también su madre, Cecilia Cádiz. “Recuerdo que a mi esposo, quien es constructor, uno de sus jefes le dijo hace como 25 años, que fueran a Santiago a comprar unos leones para su casa, cuando llegaron allá, a mi marido le gustaron tanto que se compró uno para la casa, desde ese tiempo que tenemos este león blanco”, comentó Cádiz.

Debemos poner los puntos sobre las íes en torno al tema de los felinos de la plaza y comprender en definitiva, que de no ser presentadas fotografías o videos que demuestren la existencia de los leones de la Plaza de Armas (o la aparición de los mismos leones), el peso de la verdad favorece a los que aseguran que todo este asunto sólo es un bien hilvanado mito urbano, mismo que ya se ha alojado en el inconsciente colectivo del ciudadano sanfelipeño y que posiblemente jamás sea develado.

Roberto González Short.

rgonzalez@eltrabajo.cl