Héctor Calderón, más conocido como el ‘Manchao’, agradeció a las numerosas personas que se han preocupado por lo que le sucedió.

PUTAENDO.- Luego de reponerse del brutal ataque recibido a manos de un desconocido que le propinó una herida cortopunzante en su abdomen, don Héctor Calderón Núñez recibió a Diario El Trabajo en su hogar, agregando que con muelas y dientes volvería a defender su vida y su negocio si tuviese que vivir la misma experiencia por la que pasó el martes en horas de la tarde.

Con la tranquilidad que le caracteriza, don Héctor señala que a la mujer que ingresó a su negocio para solicitar alguna información de un eventual arriendo, él la atendió como a cualquier otro cliente, en forma respetuosa y asegurándole que no habían viviendas para arrendar en el sector, donde luego de un par de minutos ingresó un sujeto joven, el que le pidió que le pesara dos kilos de pulpa, para posteriormente pedirle queso de cabeza, ocasión en que al darle la espalda a dicho joven, lo tomó por el cuello con la intención de meterle la mano a sus bolsillos. En ese instante don Héctor asegura que »me apretó muy fuerte el cuello y sentí que metía su otra mano en mi ropa. Me fui en collera en ese mismo instante, forcejeamos hasta que logré soltarme la mano e incluso le pegué un buen par de combos, solo sentí un pinchazo en mi estómago, sin saber que me habían apuñalado. Seguimos forcejeando y caímos al suelo, donde este joven aprovechó de robarme el dinero y no me dejaba pararme y salió arrancando de mi negocio».

Esta cuchilla de 20 centímetros fue encontrada en el local del ‘Manchao’, la que el delincuente perdió cuando Héctor Calderón lo enfrentó, razón por la cual terminó atacándolo con un punzón que le provocó una lesión solo leve afortunadamente.

Don Héctor asegura que hoy después de analizar lo ocurrido, tiene claro que de no haber forcejeado con el delincuente y no haber opuesto resistencia, tal vez hubiese sido una cosa más grande, porque afortunadamente entre el forcejeo el sujeto botó la cuchilla, la que fue encontrada la mañana de este miércoles en un rincón de la sala donde ocurrió el ataque, cuchilla que fue retirada por Carabineros y que tendría una hoja cercana a los 20 centímetros.

«Tuve suerte porque la cuchilla se le cayó, pero no tuve miedo pues con muelas y dientes defenderé mi vida y lo que a mí me ha costado si esto me volviera a ocurrir, lo que nunca me había pasado en todos mis años de trabajo. Yo soy católico, a mi manera, y creo que de alguna forma la fe, mis santos y los amigos que están aquí y que ya partieron me deben haber protegido».

– ¿No fue muy arriesgado oponer resistencia y forcejear con un tipo que tenía una cuchilla?

– «Creo que hice lo que debía hacer, porque no puede venir un tipo, amenazarlo y llevarse tan fácilmente lo que uno se gana honradamente. Opuse resistencia y me fui en collera, le di también un buen par de combos, por lo que no sentí temor y gracias a Dios estoy bien, quiero agradecer a tantas personas que se preocuparon por mí, que llamaron, porque yo nunca pensé que había tanta gente que me podía estimar».

– ¿Seguirá trabajando, Don Héctor, a pesar de lo que ocurrió?

– «Claro que sí, con más ganas que nunca, pero con algunas precauciones que tomaremos. Y usted me ve que yo ya estoy trabajando en lo que sé hacer y en lo que me gano mi vida, y sigo esperando a todos mis clientes para atenderlos como siempre les he atendido en toda mi vida», señaló Héctor Calderón.

Por último, continúan las intensas diligencias para tratar de dar con el autor del brutal ataque, donde por medio de fuentes extraoficiales se conoce que estarían bien avanzadas las investigaciones que permitirían la captura del autor del robo y de la puñalada durante las próximas horas.

Patricio Gallardo M.

 

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