SIN ARGUMENTOS.- Así de simple, sin argumentaciones ni explicaciones, el Tribunal de Familia de San Felipe ordenó seis meses más de esta cuestionada medida cautelar para una niña que, desde sus trece años perdió su total libertad.

SIN ARGUMENTOS.- Así de simple, sin argumentaciones ni explicaciones, el Tribunal de Familia de San Felipe ordenó seis meses más de esta cuestionada medida cautelar para una niña que, desde sus trece años perdió su total libertad.

  • Muchacha de 14 años esperaba regresar al fin con su familia: Equipos técnicos no entienden por qué la jueza envió de regreso a la menor, ya que no pudieron encontrar inicios de vulneración sexual, estableciendo que la niña siente apego por su madre y que solo desea regresar a su casa, de donde fue separada por un sistema injusto y por la determinación de una jueza que los que saben no logran comprender.

Hoy miércoles Diario El Trabajo ofrece a la opinión pública el resultado de nuestras investigaciones en torno al caso que denunciamos ayer, en el que dimos a conocer el drama que toda una familia está viviendo en Calle El Medio de Santa María, luego que el Tribunal de Familia de San Felipe impidiera a una niña el poder reunirse con su madre y hermanos, tras permanecer durante seis meses internada en el proyecto Casa Sagrada Familia, de Los Andes, y dependiente del Obispado de San Felipe, pese a que la PDI había descartado tras una investigación generada por una denuncia anónima, que la niña o sus hermanos estuvieran siendo vulnerados sexualmente.

POLÉMICA RESOLUCIÓN
Lo absurdo, dramático y quizá hasta cuestionable de este caso, es que varios equipos técnicos que laboran dentro de la red colaboradora del Sename, equipos de expertos profesionales en psicología, trabajo social y conducta humana, y aunque pese a todo el trabajo de un año entero llegaran a hacer las evaluaciones que recomendaban el egreso de la niña la semana anterior, la jueza titular del Juzgado de Familia de San Felipe, Luz Eliana Ramírez Herrera resolviera que la menor tendría que seguir tras las paredes de la Casa Sagrada Familia durante seis mese más. Esta historia fue denunciada a nuestro medio por la misma madre de la niña, doña Lucy Castro Godoy, quien sigue rogando a Dios que pronto pueda tener a su hija en su casa.

VALIENTE FUNCIONARIA
Diario El Trabajo sostuvo una amplia entrevista ayer martes con la psicóloga y directora de la Casa Sagrada Familia, dependiente del Obispado de San Felipe y que opera bajo un convenio con el Sename, Sara Muñoz Urrutia, para conocer de cerca lo que ella opina de este caso, pues la profesional quiso aclarar que la niña no es ‘una niña del Sename’, como por error ayer lo consignamos en la nota publicada.
Sara Muñoz, según investigamos, es una mujer sólida, estricta, argumentalmente equilibrada en su manera de trabajar y también poseedora de un nivel de valentía pocas veces encontrado en temas de luchar por las personas a quienes ella debe proteger, ya que accedió a respondernos incisivas preguntas de nuestro medio.

«PEDIRÉ EXPLICACIONES»
– ¿Cómo funciona la Casa Sagrada Familia y qué relación tiene con el Sename?
– Quiero aprovechar esta entrevista para explicar que nuestro proyecto Casa Sagrada Familia pertenece al Obispado de San Felipe y el Obispado tiene un convenio con el Sename, por lo tanto somos también parte de la red colaboradora del Sename, por lo tanto no se debe decir que ‘ésta es una niña del Sename o que el Sename se la quitó a sus padres’.
– ¿Qué programas son los que han trabajado psicosocialmente con esta niña?
– En este caso en particular, nuestro sistema residencial ha trabajado con otro proyecto, el que se llama Amaro (Programa Especializado en Explotación Sexual) y es ambulatorio, el que busca trabajar con los menores y familias envueltos en este perfil de explotación sexual, creo que se trabajó muy bien durante todo un año, de hecho cada tres meses debimos presentar un informe al Tribunal de Familia.
– ¿Los profesionales a cargo encontraron señales o pruebas de alguna vulneración sexual en el hogar de doña Lucy Castro para estos niños?
– Se trabajó en el rol materno de la madre (doña Lucy Castro), durante todas nuestras investigativas de ambos proyectos, no visualizamos que hubiese algún tipo de explotación sexual, no la visualizamos (…) nosotros cada tres meses informamos al Tribunal si hay alguna manifestación o eventos que señalare una nueva situación, pero nosotros no la vimos.
– ¿Entonces qué pasó, por qué la jueza sigue negándole a la niña estar con su familia?
– Lo que usted expresa es una preocupación y pregunta que todo mundo se está haciendo o se puede hacer (…) sobre qué es lo que sucedió en este caso, yo creo que esa respuesta la tiene el Tribunal de Familia de San Felipe, porque nosotros no tenemos esa respuesta.
– ¿Usted y su equipo pedirán alguna explicación sobre esta resolución al Tribunal de Familia?
– Técnicamente como directora por supuesto que voy a solicitar una respuesta al Tribunal sobre esto que ha sucedido, y una respuesta más aclaradora, en beneficio de la niña, porque es mi deber, porque nuestro objetivo es trabajar dependiendo de la realidad para que la niña vuelva a vivir con su familia, ese es el máximo objetivo de este proyecto.
– ¿Cuál es el objetivo primordial suyo y el de su equipo de profesionales?
– Mi deber como directora y nuestro deber como profesionales, es trabajar para que esta niña, si reúne las condiciones, pueda regresar a vivir con su familia, ¿cómo podemos hacerlo?, nosotros tenemos trabajo técnico; tenemos trabajo en terreno y tenemos una metodología de trabajo que es real y concreta, yo puedo hablar de éste nuestro trabajo, pero no puedo hablar de las razones que tiene el tribunal (…) mi deber es luchar para que esta chica, que efectivamente nunca comprobamos que la madre era el agente vulnerador en donde creaba un escenario para que la niña se prostituyera, y si eso no existe ¿cuáles serán las razones para que esta niña no viva con su familia?, creo que son preguntas que cualquier persona se haría, y más yo que conozco el trabajo técnico que nuestro equipo residencial ha realizado.
– ¿De no haber una respuesta positiva de esta jueza y del Juzgado de Familia, usted estaría dispuesta a interponer alguna acción o apelar a otras instancias?
– Yo no voy a hablar mal de una jueza porque no tengo las competencias para hacerlo, yo puedo hablar de nuestro trabajo, y si en algún caso si por defender a la niña aún así yo tuviera que recurrir a otras instancias superiores legales, como directora tengo un compromiso social y sí lo haría, si ésa es la pregunta, sí lo haría, si yo viera que hay alguna injusticia.
– ¿Todo este proceso con la niña ha sido sólo técnico, o también hay amor para desarrollar estos planes de trabajo para con la menor?
– Antes de lo técnico, nosotros tenemos claro que estamos trabajando con personas. Con personas que han sido dañadas y sienten, que sufren cuando son alejadas de su familia, con personas que sufren a veces el daño de un sistema injusto, y no estoy hablando sólo del sistema legal, estoy hablando de todo el sistema de un país, en este país no existen políticas públicas de Infancia, sin embargo existe una Ley de Subvención y una Ley de Menores que es muy antigua, hay Tribunales de Familia pero estos tribunales operan sólo con la Ley de Familia, y resulta que estamos hablando con temáticas de Infancia, procesos evolutivos del ser humano y con daños.
– En este caso puntual, porque podríamos hablar de muchos casos a nivel nacional, ¿quién defiende a esta niña del sistema?
– ¿Qué pasa con los derechos de esta niña?; ¿Quién se hace la pregunta? Cuando una niña tiene el derecho a vivir con su familia y que hemos trabajado con ella, y cuando hay un tercero que dijo que vio, y cuando hubo una institución que trabajó este caso por un año, esas preguntas las tiene que responder una Política Pública de Infancia que no existe en nuestro país, por eso creo que existen -por eso digo y me haré responsable de mis palabras-, algunas irregularidades asociadas a la infancia en Chile.
– Usted que tiene acceso a la menorcita y que la puede ver todos los días, ¿es feliz la niña en este lugar?
– Ningún niño es feliz cuando está lejos de sus padres y se siente querida por ellos, esa niña tiene apego por su madre y está triste porque no se pudo ir a casa.

SÍ DEBEMOS PREGUNTAR
En Diario El Trabajo quizá no tengamos las competencias para exigir explicaciones a una jueza tan experimentada como la honorable jueza Eliana Ramírez Herrera, sin embargo como heraldo de la Opinión Pública y también vigilantes de las libertades ciudadanas, y luego de escuchar el clamor de una madre; saber de las lágrimas de una niña arrebatada de su hogar y tras escuchar el criterio técnico de una profesional como doña Sara Muñoz, sí nos permitimos hacer esta pregunta: Si el Tribunal de Familia dispuso de equipos técnicos ‘para buscar y hallar La Verdad’ en este caso, ¿por qué ahora con esta resolución son descalificadas las recomendaciones y experticias de los psicólogos y trabajadores sociales?

SOLIDEZ Y COMPROMISO SOCIAL.- Sara Muñoz Urrutia, directora de Casa Sagrada Familia, de Los Andes, funcionaria que habló sin temor con Diario El Trabajo sobre cómo se está manejando este complejo caso.

SOLIDEZ Y COMPROMISO SOCIAL.- Sara Muñoz Urrutia, directora de Casa Sagrada Familia, de Los Andes, funcionaria que habló sin temor con Diario El Trabajo sobre cómo se está manejando este complejo caso.

https://i0.wp.com/eltrabajo.cl/portal/wp-content/uploads/2017/03/Resolucion33-1.jpg?fit=550%2C331&ssl=1https://i0.wp.com/eltrabajo.cl/portal/wp-content/uploads/2017/03/Resolucion33-1.jpg?fit=200%2C120&ssl=1Diario El TrabajoComunidad
Muchacha de 14 años esperaba regresar al fin con su familia: Equipos técnicos no entienden por qué la jueza envió de regreso a la menor, ya que no pudieron encontrar inicios de vulneración sexual, estableciendo que la niña siente apego por su madre y que solo desea regresar a...